Verizon concretó el martes la compra de Yahoo, un negocio de 4,500 millones de dólares donde un nuevo equipo gerencial intentará obtener mayores ingresos por publicidad de una de las marcas más conocidas en internet.
Con el cierre de la venta, finalizan 21 años de historia de Yahoo como empresa de cotización pública. También pone fin a los cinco años de Marissa Mayer como directora general, ya que no trabajará para Verizon.
El correo electrónico y otros servicios digitales de Yahoo quedarán a cargo de Tim Armstrong, director de AOL. Armstrong es ahora director general de una nueva subsidiaria de Verizon llamada Oath, que incluye los servicios de Yahoo y AOL.
La operación supone también un importante cambio para Silicon Valley ya que Oath tendrá su sede en Nueva York, que desde hace unos años está emergiendo como epicentro tecnológico alternativo a San Francisco.
Marissa Mayer, que durante los últimos cinco años estuvo al frente de Yahoo, desaparece también de la primera línea.
Verizon no obtendrá los codiciados paquetes accionarios de Yahoo en dos compañías asiáticas de internet, Alibaba Group y Yahoo Japan. Estos serán para una nueva empresa llamada Altaba.