
Un avión de la aerolínea Volaris que cubría la ruta de Querétaro a Cancún se vio obligado a regresar al Aeropuerto Internacional de Querétaro debido a una falla en la presurización de la cabina.
El incidente ocurrió poco después del despegue, lo que llevó a la tripulación a declarar una emergencia y proceder con el aterrizaje de inmediato.
Los pasajeros a bordo experimentaron molestias relacionadas con la despresurización, como dolor de oídos y mareos. Afortunadamente, la tripulación actuó con prontitud y profesionalismo, siguiendo los protocolos de seguridad establecidos para este tipo de situaciones.
Tras el aterrizaje, equipos de emergencia y personal médico esperaban en la pista para atender a los pasajeros y evaluar su estado de salud. No se reportaron lesiones graves, y la mayoría de los viajeros fueron dados de alta tras una revisión médica.
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Volaris emitió un comunicado lamentando las molestias causadas y asegurando que la seguridad de sus pasajeros es su máxima prioridad. La aerolínea también informó que se están llevando a cabo investigaciones para determinar la causa exacta de la falla en la presurización.
Este incidente subraya la importancia de los rigurosos protocolos de seguridad en la aviación y la necesidad de que las aerolíneas mantengan un mantenimiento constante y exhaustivo de sus aeronaves para garantizar la integridad de los vuelos y la seguridad de los pasajeros.