En Venezuela, más de 2,400 personas, incluyendo alrededor de un centenar de adolescentes, fueron arrestadas tras las protestas contra la reelección de Maduro que ocurrieron el 28 de julio.
El Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) informó este sábado que más de 700 detenidos durante la crisis poselectoral en Venezuela fueron trasladados a dos cárceles de máxima seguridad en la última semana, en medio de “irregularidades”.
Según la ONG, los traslados se efectuaron el 25, 27 y 30 de agosto y se realizaron con numerosas irregularidades. En algunos casos, se hizo sin informar a los familiares de los detenidos, quienes solo se enteraron cuando acudieron a llevarles comida a las comandancias policiales.
Más de 2 mil 400 personas, incluyendo alrededor de un centenar de adolescentes, fueron detenidas después de las protestas contra la reelección de Maduro el 28 de julio. Maduro fue proclamado vencedor en medio de acusaciones de fraude por parte de la oposición, que asegura que su candidato, Edmundo González Urrutia, ganó las elecciones.
A principios de agosto, el mandatario anunció que prepararía las cárceles de Tocorón y Tocuyito, que durante años estuvieron bajo el control de bandas criminales, para albergar a los detenidos de las protestas.
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Según el OVP, las autoridades no proporcionan información sobre los detenidos. “Hasta la fecha, ninguno de los trasladados en las fechas mencionadas ha tenido permitido el contacto con sus familiares ni la designación de sus abogados de confianza”.
De los 2,400 detenidos, alrededor de 1,581 han sido clasificados como “presos políticos” por la ONG Foro Penal, que encabeza la defensa de los encarcelados por motivos políticos en el país. La organización sigue recibiendo denuncias y actualizando el conteo de casos.
Además, las manifestaciones han resultado en 27 muertos y 192 heridos.