El presidente de Estados Unidos Donald Trump y su esposa Melania Trump anunciaron que por ahora no tienen planes de tener una mascota en la Casa Blanca de acuerdo a una tradición presidencial en ese país.
Stephanie Grisham, portavoz de la esposa del mandatario, dijo en un comunicado: “La familia presidencial todavía se está acomodando, por lo que no hay planes en este momento”.
Así que el trabajo de primera mascota -un puesto envidiable de la Casa Blanca con lujosos privilegios dentro de la residencia presidencial, acceso al presidente incluso después de sus horas de trabajo y cobertura de prensa positiva garantizada-no está disponible actualmente.
¿Cuáles han sido las últimas “primeras mascotas”?
El presidente Franklin D. Roosevelt tuvo su querida terrier Fala; George H.W Bush tuvo a la springer spaniel Millie, que incluso apareció en la serie de televisión “Los Simpson”; el mandatario Bill Clinton tuvo a un gato llamado Socks y la familia de Barack Obama tuvo a su perro de agua portugués Bo.
Habrá que esperar a ver si se deciden o cambian -también- la historia de la Casa Blanca en ese sentido.