Las opiniones se encuentran muy divididas respecto al caso del huachicolero, y aunque como ciudadanos se siente un hartazgo en común, la solución definitivamente no es inicia una cacería para matar a cada delincuente.
Aunque lo hiciéramos, el problema de la delincuencia y violencia que se vive actualmente en México, no se resolvería el daño de nuestro país va más allá que un hecho de justicia por propia mano.
Incluso elementos de seguridad o los mismos soldados, aquellos que hacen un esfuerzo por cumplir con su trabajo, mismo que muchas veces implica el poner en riesgo su vida, se sienten cansados y defraudados por el sistema pues ellos pueden llevar distintas detenciones y el sistema los deja libres después.
Una de las principales razones es que no estamos preparados para este sistema penal acusatorio, no se respetan los debidos procesos y protocolos para realizar una investigación y hacer a los presuntos culpables, sujetos a proceso.
Venimos arrastrando vicios desde el origen, desde el momento en que se encuentra o se sabe de alguien que ha cometido un delito, de esto nos habla Francisco Zea el día de hoy.