En Corto
Claudia Sheinbaum debe tener extremo cuidado en quienes serán las y los representantes de su campaña, pues de no ser así, puede fracasar en su intento por alcanzar la anhelada Presidencia de la República.
El botón de muestra lo tenemos en la instancia encargada de la política interior del país, la Secretaría de Gobernación, donde la ex titular de la Unidad de Medios de Comunicación, Merilyn Gómez Pozos, cometió un error garrafal con consecuencias graves para ella, para la secretaria Luisa María Alcalde, para Morena, para el presidente Andrés Manuel López Obrador y para Claudia Sheinbaum.
El error, producto de la ignorancia brutal de Merilyn Gómez, sucedió la víspera de la Navidad cuando acudió, luego de ser nombrada por Sheinbaum como la representante de su campaña en Jalisco, a actos políticos, siendo aún funcionaria pública, y nada menos que de la SEGOB, donde tuvieron que hacer malabares para “cuadrar” la fecha de su renuncia.
Al margen de que la exfuncionaria de la SEGOB y ex diputada federal por Movimiento Ciudadano, desacató la reiterada instrucción presidencial de que quienes aspiren a algún cargo de elección popular tienen que renunciar, lo cual de suyo es muy grave, la representante de Sheinbaum en Jalisco debe rendir cuentas ante las autoridades electorales. Ello debido a que la ex servidora pública se burló de las autoridades al estar “midiendo el agua a los camotes”.
Le comento esto último estimado lector porque no fue la primera vez que Merilyn hace lo que hizo en su estado. Esto ocurrió hace un mes aproximadamente, cuando buscó ser infructuosamente la abanderada a la gubernatura de su entidad, por la cuota de equidad de género.
Esa vez la libró y Merilyn Gómez siguió cobrando del erario, con la complacencia o complicidad de su amiga, Luisa María Alcalde, desoyendo ambas al presidente López Obrador.
Pero en esta ocasión su ignorancia, arrogancia, falta de tacto político (y eso que fue diputada federal) y su falta de ética, llevaron al desenlace fatal para ella y para todos los actores antes citados.
Resulta que la exdiputada acudió a eventos públicos, entre ellos a presentar una denuncia ante el Instituto Estatal Electoral en contra de Pablo Lemus y de Xóchitl Gálvez, queriendo quedar bien con Claudia Sheinbaum, quien la nombró como un guiño para Luisa María Alcalde.
Pero ese guiño le puede costar caro a la misma Sheinbaum y a su movimiento, ya que la exfuncionaria de la Unidad de Normatividad de Medios de Comunicación está siendo señalada también por estar distribuyendo de manera arbitraria e inequitativa la publicidad del gobierno federal.
El exabrupto cometido por Merilyn Gómez no pasó desapercibido esta vez, pues su compañero de partido, el emecista Pablo Lemus actuó inteligentemente y aprovechó “el regalito” de Merylin para pegar al presidente de la República, al señalar que el gobierno federal tiene metidas las manos en el proceso de elección del candidato al gobierno de Jalisco.
Esa “dura pegada” fue lo único que obligó a Luisa María Alcalde a reprender a su amiga, por sus tonterías cometidas, y que desencadenó en la renuncia de Merilyn Gómez Pozos, misma que ésta cantó a los medios locales, diciendo que había sido “con efectos al dos de enero”.
El nuevo error de primaria fue capitalizado nuevamente por sus adversarios, quienes encontraron en sus declaraciones una auténtica joya, pues la conclusión era que entonces, estaba cobrando en la SEGOB y haciendo “grilla”, desoyendo al presidente López Obrador.
Las autoridades electorales y federales, seguro tomaron nota de estas declaraciones y sus implicaciones.
Al darse cuenta del nuevo error cometido por Merilyn, Luisa María Alcalde pidió “ajustar la fecha de la renuncia”, y salió a declarar ella misma que la renuncia de su ex colaboradora había sido el 26 de diciembre, apenas unas cuantas horas antes de sus actos de campaña en Jalisco.
Falta ver si en esa cadena de errores primarios de la funcionaria son tapados por los administrativos de SEGOB, en lo que respecta a los recursos con que se desplazó hacia Jalisco, porque lo más seguro es que fueron recursos públicos.
La moraleja de esta tontería es para todos los flancos: para Movimiento Ciudadano, que en lo futuro deben optar por gente pensante para postularlas a cargos de elección popular; a Morena, porque deben tener ciertas exigencias con los partidos aliados en cuanto a las postulaciones; al presidente López Obrador, porque a pesar de sus llamados en las mañaneras, prevalece la desfachatez de algunos y ven cómo le dan la vuelta a su instrucción para no cumplirla.
A Claudia Sheinbaum porque si bien es cierto que con la campaña más que gris de su opositora, Xóchitl Gálvez, va en “caballo de hacienda” rumbo a la Presidencia de la República, lo cierto es que con errores como los de Merilyn Gómez, los ciudadanos pueden ir acumulando desconfianza y optar por votar por otra opción política.
En Cortito: Una diputada de Morena anda de escándalo en escándalo, se trata de la presidenta de la mesa directiva la Cámara de Diputados del Congreso del Estado de México, Azucena Cisneros Coss, quien, por el bien de ella y su carrera política debería despedir a sus asesores de imagen y relaciones institucionales, por haberla reunido con el expolicía Alejandro Gilmare Mendoza Díaz, alias “El Choko”.
La legisladora morenista creyó que, con sólo deslindarse del encuentro con el también líder de La Chokiza, iba a terminar todo, pero resulta que no, el asunto lejos de parar sigue más vivo que una hoguera.
Le cuento que se dieron a conocer nuevos videos, en uno “El Choko” y su banda aparecen con armas largas en la fiesta a la que invitó con sus propias palabras Azucena Cisneros Coss. A este hay que sumar otros dos, en los cuales el líder de este grupo de choque en Ecatepec, pidió a sus seguidores apoyar con lo que sea a la legisladora para conseguir la candidatura de Morena a la presidencia municipal de Ecatepec.
Sin embargo, lo que más llamó la atención es otro video en donde el dirigente de “La Chokiza” hace uso de la presión y extorsión ante las oficinas de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, para exigir la liberación de uno de sus agremiados que fue detenido por contar con una orden de aprehensión por el delito de homicidio.
Esos son los amigos de Azucena Cisneros Coss, nos cuentan que, en Palacio Nacional, el presidente Andrés Manuel López Obrador fue informado de inmediato del presunto involucramiento de la legisladora con el crimen organizado y esa es la razón por la cual de inmediato de deslindo de ella, habrá que esperar que hará la gobernadora Delfina Gómez, quien no ha dicho nada al respecto.
Vaya escándalo en el que está metido Higinio Martínez Miranda y el dirigente nacional de Morena, Mario Delgado, ya que morenistas los acusan de haber manipulado la encuesta para buscar un escaño en el Senado de la República.
Los militantes del partido guinda aseguran que la dirigencia nacional hizo de todo para inducir la mediación para favor del senador.
El asunto es grave, ya que según los documentos, la encuesta se hizo en los municipios en donde el grupo político Mexiquenses de Corazón tiene mayor presencia y cuyo líder, curiosamente, es Higinio Martínez Miranda.
Es decir, Mario Delgado realizó una medición a modo pisoteando los principios básicos de Morena de no mentir, no robar, no traicionar al pueblo.
Lo que sigue es ver qué opina de esto el presidente Andrés Manuel López Obrador, cuando el tema lo aborden los periodistas en la conferencia mañanera.