Un nuevo tema ha causado controversia en el Senado pues proponen la Separación de Poderes en los estados donde la violencia ha rebasado a las autoridades
Esta semana la bancada del PAN propuso desaparecer los poderes en Veracruz, debido a la alta criminalidad que se vive en la entidad. En respuesta, el grupo de Morena en el Senado, también solicitó desaparecer los poderes en Tamaulipas y Guanajuato.
Fue el queretano Mauricio Kuri, representando a la fracción del PAN, quien pidió formalmente este recurso.
“Las senadoras y los senadores del grupo parlamentario del PAN remiten petición para que el Senado de la República ejerza la facultad a que se refiere la fracción V del artículo 76 Constitucional, en materia de desaparición de poderes en el estado de Veracruz”, comentó.
En respuesta, Morena en el Senado ingresó las solicitudes para que el Senado ejerza la misma facultad en Guanajuato y Tamaulipas, y dijo “Creo que lo más correcto sería actuar con mucha prudencia, llamo a la cordura. Es un asunto delicado lo que pasa en Tamaulipas y hemos solicitado la atracción por parte de la Fiscalía General, el caso Tamaulipas; por la supuesta ejecución, masacre de personas simulando confrontaciones con grupos del crimen organizado.
“Pero no me quiero adelantar, no quiero adelantar vísperas. Serán las comisiones las que definan. No es fácil configurar la hipótesis de desaparición de poderes. Es jurídicamente complicado, pero son recursos que los grupos parlamentarios realizan y que yo respeto.”, dijo Ricardo Monreal.
Sin embargo, la situación no es tan fácil como la plantean los Senadores. La desaparición de poderes es la acción legal de quitar el poder al Ejecutivo local, así como a su congreso. La Constitución otorga a los Senadores la facultad de disolver poderes y hacer una declaratoria para que se nombre a un gobernador interino.
Los casos en los que se puede declarar una separación de poderes son:
– Romper los principios del régimen federal.
– Abandonar el ejercicio de funciones.
– Que estén imposibilitados para ejercer su cargo.
– Prolongar la permanencia en el cargo una vez terminado el periodo para el que fueron electos.
– Adoptar una forma de gobierno distinto a lo que marca la Constitución.
El objetivo de esta figura legal es reestructurar los poderes, no eliminarlos.
En caso de que esto suceda, el presidente de la república tiene que nombrar una terna y de ahí el senado elige al gobernador provisional que su primera obligación sería convocar a elecciones dentro de los primeros tres meses. Estos comicios deberán llevarse a cabo dentro de los seis meses siguientes a la fecha de la convocatoria.
Luego de ello, se deberán hacer las designaciones provisionales de los magistrados del tribunal superior de justicia quienes podrán ser confirmados cuando tomen posesión de su cargo los integrantes del Congreso.
Sería un proceso aproximado de un año o tal vez más. No obstante, esta propuesta no garantiza que la seguridad en dichos Estados mejore, así que solo parece que los Senadores están jugando a las vencidas y ponen en medio a los ciudadanos.
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EAS