De acuerdo con el informe de la Fiscalía estatal, un grupo armado la interceptó junto con su chofer después de que pincharon las llantas del vehículo en el que se desplazaban.
Le confiscaron sus tarjetas de crédito para realizar retiros de efectivo y le arrebataron sus pertenencias, mientras la diputada permaneció retenida en un terreno baldío.
La legisladora relató que no fue la única víctima del grupo armado que la secuestró, ya que había otras personas detenidas a quienes también les robaron sus pertenencias. Cerca de las 4 de la mañana, fue liberada y continuó su camino hacia Puebla, donde presentó una denuncia ante la Fiscalía del Estado.
Después del incidente, el PRI solicitó un refuerzo de la seguridad en la carretera México-Puebla, la cual, según afirman, “se ha convertido en un verdadero foco rojo”.
“Exigimos a las autoridades que refuercen la seguridad en esta vía, la cual se ha convertido en un auténtico foco rojo, poniendo en riesgo la vida de la ciudadanía”, reclamó el PRI.
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La diputada Alcalá informó que tanto ella como su colaborador no resultaron heridos durante el secuestro exprés, pero expresó sentir temor por lo ocurrido.
También lamentó que este tipo de delitos sean comunes en las carreteras del país, coincidiendo con el coordinador de su bancada, Rubén Moreira, quien en varias ocasiones ha denunciado incidentes similares en su cuenta de X.
“Los lamentables hechos y circunstancias de los que fui víctima junto a mi colaborador me tienen consternada y a la vez, llena de preocupación por ser un síntoma característico de la realidad a la que se enfrentan a diarios miles de personas usuarias de la red de carreteras y autopistas de México”, comentó.