La Dirección General de Sitios y Monumentos de Patrimonio Cultural concluyó la consolidación de la obra en la Catedral Metropolitana, mientras que aún queda pendiente la restauración de algunas esculturas.
La Catedral Metropolitana es un monumento que necesita atención continua, por lo que en julio pasado un equipo de restauradores comenzó trabajos de limpieza y consolidación en la fachada sur y la cúpula del Sagrario, obra del arquitecto Lorenzo Rodríguez.
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Dichas labores, catalogadas como emergentes y que recibieron 6 millones de pesos, fueron concluidas ayer y estuvieron a cargo de la Dirección de Sitios y Monumentos del Patrimonio Cultural (DGSMPC), de la Secretaría de Cultura, e incluyeron limpieza y consolidación de la fachada sur (de frente al Zócalo), de su cúpula, así como la sustitución de la malla antipalomas y el levantamiento completo de toda su ornamentación de cantera.
PENDIENTE RESTAURACIÓN DE ESCULTURAS
Sin embargo, queda pendiente para los próximos meses la restauración de algunas esculturas dañadas, la limpieza de la fachada oriente (frente a la Plaza Manuel Gamio) y la revisión a fondo de los pilotes de control, que son los mecanismos que mantienen la estabilidad del inmueble histórico ante el hundimiento diferencial que enfrenta de manera permanente.
Así lo detalla a Excélsior Elisa Ruiz Covarrubias, directora de Estudios y Proyectos de la DGSMPC. “Esta etapa fue un tema de emergencia, así que sólo revisamos las piezas, hicimos limpieza general y consolidaciones emergentes, pero el tema de reintegración (de piezas), eso todavía no se ha determinado.
Lo que sí hicimos fue el levantamiento completo de toda la ornamentación (del Sagrario) para detectar los elementos con mayor desgaste y, en los próximos meses, hacer un proyecto de integración de la fachada, revisarlo con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y determinar los criterios o el nivel de intervención en cada elemento de cantería”, comentó.
Elisa Ruiz explica que para ubicar las grietas en la cúpula y en el tambor del Sagrario Metropolitano fue necesario utilizar una cámara termográfica que aportó el Instituto de Ingeniería de la UNAM.
Si recuerdan, el año pasado se registró el colapso de una pieza en cantería de una escultura, que fue la cabeza de un querubín (Excélsior, 23/08/2023), así que aprovechamos el recurso para revisar que la fachada (del Sagrario) no tuviera elementos frágiles y así evitar un nuevo colapso. También se hicieron limpiezas, consolidaciones urgentes y se colocó una malla para que no ingresen las palomas, dado que el guano es bastante nocivo para la cantera”, precisa.
¿El Sagrario no contaba previamente con esta malla? “Hace muchos años se colocó la malla antipalomas, pero ya no cumplía su labor porque estaba rota y, evidentemente, era propalomas. Por esta razón retiramos el guano, hicimos las consolidaciones y pusimos una nueva malla”.
¿Al revisar la fachada del Sagrario detectaron la necesidad de alguna restauración a fondo? “Encontramos, por lo menos, dos esculturas que requieren de atención más precisa, pero me gustaría compartirle esa información cuando concluyamos el análisis de la fachada”.
¿Se realizará algún trabajo similar en la fachada oriente? “Estamos programando las etapas para los siguientes tres años, que incluirá la atención del lado oriente… aunque aquí hay que destacar que el conjunto catedralicio no ha dejado de prestar su servicio eclesiástico, mientras se han realizado los trabajos.
Para ello se cerró la fachada sur y el acceso ocurrió por la fachada oriente, así que, una vez terminada esta etapa pasaremos a la fachada oriente y se permitirá el acceso por el lado sur sin problema”, apunta.
¿Qué otros trabajos realizarán próximamente? “Trabajar la fachada oriente del Sagrario, y restaurar detalle en el interior de Catedral y del Sagrario. Por ejemplo, revisar la escalera del coro (del Sagrario), labrada en piedra, y que por el movimiento diferencial tiene algunas situaciones; y en Catedral programaremos la atención de portones y ula fumigación de todo el conjunto.
Después vendrá otra parte importante que queremos realizar en los pilotes del conjunto, instalados en los años 70. En 2020, se brindó mantenimiento a dichos pilotes, ya que, desafortunadamente, no todos han funcionado como se pensó.
¿Qué porcentaje sigue en operación? “El Sagrario tiene 400 pilotes y la Catedral 600 más, y se estima que funciona sólo 30% de éstos, los cuales ayudan a contener un poco el hundimiento diferencial. Lo que queremos es hacer un (nuevo) estudio y volver a monitorear los pilotes para confirmar su operación”.
¿Cuánto tiempo llevaría el estudio de los pilotes? “El estudio de los pilotes y del subsuelo nos llevará un ejercicio fiscal (un año)”, concluye.