De acuerdo con la denuncia, los abogados presuntamente le habrían pedido a Juan Collado entregar las acciones de su empresa
El abogado Juan Collado Mocelo -detenido desde 2019 por los delitos de lavado de dinero y delincuencia organizada- denunció al exconsejero jurídico de la Presidencia, Julio Scherer Ibarra, así como a tres abogados más y a un operador financiero por los delitos de extorsión, asociación delictuosa, lavado y tráfico de influencias.
De acuerdo con el medio Reforma y Animal Político, el abogado detalló que supuestamente Scherer Ibarra ofreció conseguirle un acuerdo reparatorio de 2 mil millones de pesos para que librara la prisión.
También acusó que un grupo de abogados vinculados presumiblemente con Scherer, le pidió que vendiera Caja Libertad a Banco Afirme propiedad de Julio Villarreal Guajardo. Según la denuncia, los abogados le dijeron que el empresario bancario era amigo del entonces consejero jurídico.
“Realizaron hechos que tenían como fin utilizar al Estado Mexicano y sus respectivas instituciones, a efecto de que les entregara diversas cantidades de dinero y otros bienes de mi propiedad (…) crearon una red de complicidades para obtener beneficios económicos”, según la denuncia cita por el diario.
Los abogados denunciados son Juan Antonio Araujo Rivapalacio, César Omar González Hernández, Isaac Pérez Rodríguez y David Gómez Arnau y sería la razón por la que la Fiscalía General de la República (FGR) pretende la vinculación a proceso de éstos.
El despacho involucrado es, según la denuncia, Araujo, González, Peimbert, Robledo & Carrancá (AGPR&C).
De acuerdo con su propio dicho, Collado pagó a los abogados 10 millones de pesos para que la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), entonces encabezada por Santiago Nieto Castillo, cerrara una una investigación en su contra.
También les habría adelantado 1.5 millones de dólares, de 3 millones solicitados, para que lo defendieran.
Según el informe del diario, Collado presentó la denuncia en octubre de 2021 para buscar un criterio de oportunidad, con el fin de que la FGR se desista de la acción penal en su contra, lo que conllevaría un acuerdo de reparación del daño.
El abogado relató a la FGR, de acuerdo con Reforma, que Araujo le ofreció una alianza en 2018, “ya que Scherer tendría control de todo el aparato judicial, el cual podría ser utilizado en favor de mis clientes”.
El abogado Paulo Díez Gargari, señaló en octubre de 2021 en Aristegui en Vivo que el exconsejero jurídico de la Presidencia era socio del despacho AGPR&C y apuntó hacia una red de abogados vinculada al exfuncionario y a casos de alto perfil nacional.
Proceso
El 13 de octubre, Julio Scherer negó haber intervenido como consejero jurídico de la Presidencia en los casos de Alonso Ancira, Juan Collado, Interjet, Prisa y Víctor Álvarez Puga e Inés Gómez Mont.
Scherer afirmó que la función que desempeñó en el cargo de servidor público fue acompañar a las dependencias públicas para presentar las denuncias correspondientes.
El 15 de octubre, el abogado Juan Araujo calificó como “rotundamente falso” el señalamiento hecho por Paulo Díez Gargari de que su despacho está relacionado con Julio Scherer y con una serie de casos de alto impacto.
“Lo que me parece inaudito es rebajar el lugar de Julio Scherer a un papel perverso de distribuidos de asuntos de justicia selectiva”, expresó.
Explicó que conoce bien a Scherer, pero que estos tres años fue un hombre del presidente y no un abogado litigante o un gestionador de intereses particulares; que solo lo vio en tres ocasiones y no abordaron temas legales, penales o solicitudes.
Además, dijo que de los casos mencionados lleva dos, pero que le fueron referidos a su despacho por el abogado Jaime Guerra, que no es amigo del gobierno
El 17 de diciembre del año pasado, el abogado Paulo Díez insistió en que Julio Scherer Ibarra tejió una red de complicidad y corrupción desde la Consejería Jurídica de la Presidencia, lo cual calificó como una traición al presidente López Obrador y señaló que presentaría pruebas de sus dichos.
A principios de febrero de este año, varios medios dieron a conocer que la Fiscalía General de la República (FGR) judicializó un expediente en contra de cuatro abogados, entre ellos Juan Antonio Araujo Rivapalacio, considerado uno de los litigantes relacionados con casos de gran impacto, como el del empresario Alonso Ancira.
El diario La Jornada señaló que el juez de control José Rivas González fijó fecha para la audiencia inicial en la que el Ministerio Público Federal imputará los delitos de asociación delictuosa, tráfico de influencias, extorsión y operaciones con recursos de procedencia ilícita.
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“Presuntamente, el litigante y sus socios extorsionaron a personajes investigados por la FGR ofreciendo que sus casos no serían judicializados, entre ellos los del abogado Juan Collado Mocelo, el del empresario señalado como facturero Víctor Manuel Álvarez Puga, y miembros de la directiva de la Cooperativa Cruz Azul, cuando el consorcio deportivo y
En este contexto, nuevamente Díez Gargari reiteró sus dichos que que Julio Scherer Ibarra encabezó presumiblemente una “red de corrupción y de extorsión”, conformada por una serie de despachos de abogados que obtenían contratos multimillonarios, aprovechándose de la importancia de del cargo público del entonces abogado de Andrés Manuel López Obrador.
Afirmó que traicionó la confianza del presidente, para obtener un beneficio propio y para “un grupo muy poderoso” de abogados.
Julio Scherer
Julio Scherer Ibarra, exconsejero jurídico de Presidencia durante la administración de Andrés Manuel López Obrador, desmintió que haya participado de una supuesta extorsión al abogado de destacados políticos Juan Collado, hoy preso y acusado por lavado de dinero, entre otros.
“En relación al reportaje publicado el día de hoy en el periódico Reforma, en el que se hacen señalamientos sobre mi persona, hago las siguientes aclaraciones (…). En efecto, recibí a los hijos del señor Collado a solicitud expresa de ellos”, confirmó Scherer Ibarra.
Sin embargo, añadió que turnó el asunto “a la Fiscalía General de la República, por ser de su competencia”.
Por último, señaló: “No conozco personalmente al señor Collado, ni estoy enterado de las conversaciones de éste con sus abogados”. “Todo lo demás, son inferencias de mala fe”, sentenció.
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CAB
