El surrealismo fue un movimiento artístico que busca trascender lo real a partir del impulso psíquico de lo imaginario y lo irracional
Nacida el 16 de diciembre de 1908 y muerta un 8 de octubre de 1963, Remedios Varo fue parte de la generación del 27 y afín al surrealismo, convirtiéndose en ejemplo de genialidad y genuina expresión artística.
Entre sus obras más conocidas están La revelación o el relojero (1955), Exploración de la fuentes del río Onírico (1959), Vampiros vegetarianos (1962) y Creación de las aves (1957), entre muchas otras. La mayoría está actualmente en colecciones privadas.
A causa de la Segunda Guerra Mundial llega a México con muchos europeos, entre varios artistas e intelectuales que llegaron al país.
En su estadía en suelo mexicano, conoció a creadores como Diego Rivera, Frida Kahlo y María Izquierdo, pero también forjó relaciones con otras personalidades que al igual que ella, se encontraban en el exilio; particularmente con la pintora y escritora Leonora Carrington.
Por eso, a 56 años de su muerte, les quiero contar de otras talentosas mujeres que se expresaron a través del simbolismo, surrealismo y fantasía, abordando la complejidad del inconsciente.
Leonora Carrington
Nacida el 6 de abril, 1917 en Lancashire, Inglaterra, y nacionalizada mexicana, creció en una familia rica y se vio obligada a asistir a los conventos a una edad temprana.
En 1926 fue expulsada de dos conventos y se le considero imposible de recibir educación, comenzando su aprendizaje como una artista en 1936 en la academia de Amedee Ozenfant en Londres.
En 1938 escribió una obra de cuentos titulada La casa del miedo y participó junto con Max Ernst en la Exposición Internacional de Surrealismo en París y Ámsterdam.
Previamente a la ocupación nazi de Francia, varios de los pintores del movimiento surrealista, incluida Leonora Carrington, se volvieron colaboradores activos del Freier Künstlerbund, movimiento subterráneo de intelectuales antifascistas.
En 1937 conoce a Max Ernst y decide vivir con él. En 1938 participa en la Exposición internationale du surrealisme, Galerie Beaux Arts, París. Pero en 1941 después de que Max Ernst es encarcelado, Leonora se escapa a Portugal donde ella conoce a Renato Leduc, a partir de una presentación a cargo de Pablo Picasso en París y consigue evitar la guardia de su padre y se escapa a la embajada mexicana.
En 1942 se establece en México y se encuentra con algunos amigos refugiados que incluyeron a Benjamin Peret, Remedios Varo y Kati Horna. A lo largo de su larga carrera, publicó una serie de novelas, cuentos y obras de teatro, cine, pintó, hizo escultura y tapices. En general era una artista que dedicó su vida al amor de la creación.
Frida Kahlo
Probablemente la artista gráfica mexicana más conocida, aunque no la más reconocida, nació el 6 de julio de 1907 en la Ciudad de México, en la casa que fuera propiedad de sus padres desde 1904, y que hoy se conoce como la Casa Azul.
Hija de Wilhelm (Guillermo) Kahlo, de ascendencia húngaro-alemana, y Matilde Calderón, originaria de Oaxaca, Frida fue la tercera de cuatro hijas. Sus dos hermanas, Matilde y Adriana, fueron las mayores y Cristina, la menor.
A los seis años Frida enfermó de poliomielitis, causándole que su pierna derecha quedara más corta; esto fue motivo de burlas. Sin embargo, estos sucesos no le impidieron ser inquieta y tenaz, realizando sus estudios en la Escuela Nacional Preparatoria.
A los 18 años, el 17 de septiembre de 1925, Frida tuvo un trágico accidente cuando el autobús en el que viajaba fue arrollado por un tranvía con fatales consecuencias para ella: fractura de varios huesos y lesiones en la espina dorsal.
Debido a la inmovilidad a la que se vio sometida varios meses, Frida comenzó a pintar. Así, se relaciona con varios artistas, entre ellos la fotógrafa Tina Modotti y el entonces ya reconocido artista Diego Rivera.
Elisa Breton
Artista y escritora francesa, tercera esposa del escritor y surrealista francés André Breton.
Nacida en Chile a principios del siglo XX, conoció al fundador del surrealismo durante la Segunda Guerra Mundial en Nueva York, donde vivía junto a su hija, Jimena Claro.
Después de casarse en 1945, Elisa y André Breton emprendieron un largo viaje a las reservas indias estadounidenses, previo a asentarse en París un año después.
Ahí, Elisa Breton se integra en el ambiente surrealista, colaborando con varias revistas de ese movimiento como Medium y participando en exposiciones colectivas.
Elaboró cajas surrealistas y esculturas con diversos objetos, y en 1993 publicó un álbum con fotografías de André Breton, fallecido en París.
Francesca Woodman
Fotógrafa estadounidense, hija de los artistas plásticos George Woodman y Betty Woodman.
De trágico final en Manhattan, se inscribe en la generación de mujeres de vanguardia de los años 1970 que reivindicaron su aportación y visión del mundo, entre las que están artistas activistas como Cindy Sherman, Martha Rosler o Ana Mendieta.
Su obra consiste en retratos, mayoritariamente de mujeres en blanco y negro, siendo ella misma la modelo en muchas ocasiones, en el que las figuras humanas aparecen borrosas, difuminadas en la sombra en espacios invadidos por el deterioro y abandono.
Durante su estancia en Roma elabora fotografías en las que el fondo muestra paredes deterioradas, enfatizando la calidad geométrica del origen arquitectónico clásico, cuyo estado es ruinoso.
Escenarios que aluden a los ambientes en los que le gustaba ubicar su trabajo en Rhode Island, principalmente con viejas mansiones victorianas o fábricas abandonadas que le pudieran ofrecer el contexto apropiado para lo que quería expresar, denunciar.
Elsa Schiaparelli
Diseñadora de modas italiana que destacó especialmente entre los años 1930 y 1940, señalada como “la gran olvidada” de la moda pues su nombre no siempre se menciona entre los grandes creadores en la historia.
Nació a finales del siglo XIX, en una Roma que atravesaba por un esplendor decadente de cara al futuro ineludible.
Influenciada por los movimientos futuristas italianos y por los cubistas y fauvistas parisinos, sus creaciones, de marcado carácter surrealista, compitieron en fama y en relevancia histórica con figuras como Chanel.
Schiaparelli es la responsable de que los desfiles de moda sean concebidos ahora como un espectáculo.
Fanática del arte, Schiaparelli quería reflejar en cada una de sus creaciones el movimiento artístico que en los años 30 estaba en boga, el surrealismo; y para ello colaboró con artistas como Jean Cocteau y Salvador Dalí.
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