El gobierno de Reino Unido abandonó este lunes 3 de octubre los planes de reducir el impuesto sobre la renta para los que más ganan
Reino Unido dio marcha atrás a sus planes para eliminar la tasa del 45% del impuesto sobre la renta que pagan las personas más ricas del país.
El ministro de Economía, Kwasi Kwarteng, le dijo a la BBC este lunes que la propuesta se había convertido en “una gran distracción” dentro de lo que era un paquete económico “sólido”.
Él y la primera ministra Liz Truss han pasado los últimos 10 días defendiendo el recorte ante el caos del mercado y la creciente alarma entre el gobernante Partido Conservador.
La decisión se produce después de que varios parlamentarios de su partido criticaran el plan. Este domingo, Truss había asegurado que mantendría la polémica medida.
También se produjo horas después de que los conservadores publicaran extractos anticipados de un discurso que Kwarteng dará más tarde el lunes en la conferencia anual del partido en la ciudad de Birmingham, en el centro de Inglaterra. Debía decir: “Debemos mantener el rumbo. Confío en que nuestro plan es el correcto”.
La libra subió después del anuncio de Kwarteng a alrededor de 1.12 dólares, aproximadamente el valor que tenía antes de los anuncios presupuestarios del 23 de septiembre.
El plan para eliminar la tasa del 45% del impuesto sobre la renta que pagan las personas que ganan más de 150 mil libras esterlinas al año (168 mil dólares) formaba parte de un paquete de recortes de impuestos que el gobierno de Truss anunció hace solo 10 días para impulsar la economía del país.
Pero el paquete fiscal provocó días de turbulencias financieras e hizo que la libra cayera frente al dólar a mínimos históricos.
Algunos de los prestamistas más grandes del país suspendieron acuerdos hipotecarios en medio de la incertidumbre que se generó.
“Hablamos con la gente y la escuchamos”, aseguró el ministro la mañana de este lunes en declaraciones en el programa de televisión matutino BBC Breakfast.
La reducción del impuesto sobre la renta para los más ricos habría representado un ahorro fiscal de casi 3 mil 400 dólares anuales para una persona con un sueldo de 200 mil libras al año (224 mil dólares).
El gobierno había defendido la medida asegurando que bajarles los impuestos a los ricos haría que Reino Unido fuera más competitivo y fomentaría la creación de empresas y la inversión.
Otras medidas anunciadas en el minipresupuesto del gobierno incluyen un recorte de la tasa básica del impuesto sobre la renta del 20% al 19% y la también polémica eliminación del tope de los incentivos o bonificaciones salariales de los banqueros, que a veces pueden superar el millón de dólares.
El plan
Truss asumió el cargo hace menos de un mes y prometió remodelar radicalmente la economía británica para poner fin a años de lento crecimiento. Pero el anuncio del gobierno de un paquete de estímulo que incluye 45 mil millones de libras en recortes de impuestos, que se pagarán con préstamos del gobierno, hizo que la libra se desplomara a un mínimo histórico frente al dólar.
El Banco de Inglaterra se vio obligado a intervenir para apuntalar el mercado de bonos, y los temores de que el banco suba pronto las tasas de interés hicieron que los prestamistas hipotecarios retiraran sus ofertas más baratas, lo que generó confusión entre los compradores de viviendas.
El paquete resultó impopular, incluso entre los conservadores. La reducción de impuestos para los que más ganan y la eliminación de un tope en las bonificaciones de los banqueros mientras millones se enfrentan a una crisis del costo de vida impulsada por el aumento de las facturas de energía se consideraba políticamente tóxica.
Truss y Kwarteng insisten en que su plan generará una economía en crecimiento y eventualmente generará más ingresos fiscales, compensando el costo de los préstamos para financiar los recortes actuales. Pero también han señalado que será necesario recortar el gasto público para mantener la deuda del gobierno bajo control.
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CAB