
El presunto feminicida serial falleció el 13 de abril de 2025 en el Reclusorio Oriente; la necropsia indicó que su muerte fue por un golpe en la cabeza.
Miguel Cortés, conocido como el “químico feminicida” de Iztacalco, falleció el 13 de abril de 2025 en el Reclusorio Preventivo Varonil Oriente, donde se encontraba detenido desde su captura en 2024. La Secretaría de Seguridad Ciudadana informó que Cortés sufrió una caída en su celda, lo que provocó un traumatismo craneoencefálico. Fue trasladado al Hospital General de Iztapalapa, donde fue declarado sin signos vitales debido a un paro cardiorrespiratorio .
Cortés fue arrestado tras el asesinato de María José, una joven de 17 años, y el intento de feminicidio de su madre. Durante el registro de su vivienda, las autoridades encontraron restos humanos, objetos personales de mujeres desaparecidas y dispositivos electrónicos que lo vinculan con al menos siete feminicidios ocurridos en la Ciudad de México durante más de una década .
El caso de Cortés expuso fallos institucionales en la prevención y persecución de la violencia de género en la capital mexicana. Su muerte en prisión ha generado controversia, ya que se encontraba en espera de una audiencia judicial relacionada con dos de sus víctimas al momento de su fallecimiento .
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Hasta la mañana del 14 de abril, el cuerpo de Cortés no había sido reclamado por ningún familiar. La necropsia realizada por la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México confirmó que la causa de su muerte fue el traumatismo craneoencefálico sufrido durante la caída .
El caso de Miguel Cortés resalta la importancia de fortalecer los mecanismos de justicia y protección para las mujeres, así como la necesidad de garantizar que los responsables de feminicidios enfrenten las consecuencias legales correspondientes.