
En la Ciudad de México, más de un millón de perros y gatos están viviendo en las calles, luego de ser abandonados por sus dueños
Con el objetivo de detener el creciente abandono de mascotas en la CDMX, el grupo parlamentario de Morena en el Congreso de la Ciudad de México presentó una iniciativa para tipificar como delito el abandono animal.
De aprobarse, esta conducta podría castigarse con hasta tres años de prisión y multas superiores a los 56 mil pesos.
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Al presentar la iniciativa, que contempla reformas al artículo 350 BIS del Código Penal local, el legislador morenista, Miguel Ángel Macedo Escartín subrayó que se considerará abandono dejar a un animal “en la vía pública, en propiedades públicas o privadas, o en áreas comunes”, privándolo de atención, resguardo y alimentación, y colocándolo en una situación de vulnerabilidad que comprometa su integridad o supervivencia.
De acuerdo con asociaciones de protección animal, en la ciudad, más de un millón de perros y gatos viven en las calles, tras ser abandonados por sus dueños.
“La Ciudad de México se ha convertido en uno de los epicentros del abandono animal en el país”, advirtió Macedo Escartín.
El legislador destacó que cada año cientos de miles de animales, principalmente perros y gatos, son abandonados por razones que van desde la desinformación hasta la falta de recursos económicos.
“Estas criaturas, que alguna vez recibieron cariño, hoy vagan desorientadas y expuestas al tráfico, al hambre, al maltrato y a la enfermedad. Son perros y gatos que hoy solo conocen el frío del asfalto y el silencio del abandono”, enfatizó.
Además de las sanciones penales, la propuesta legislativa busca incorporar un enfoque de prevención y educación en materia de bienestar animal.
Macedo Escartín insistió en que la iniciativa no tiene como fin exclusivo castigar, sino generar un cambio cultural en la relación que los ciudadanos mantienen con los animales de compañía.
“Solo mediante un esfuerzo conjunto se podrá garantizar el bienestar de los animales y, en consecuencia, mejorar la calidad de vida de la comunidad en general”, señaló.
La iniciativa fue turnada a la Comisión de Administración y Procuración de Justicia para su análisis, con opinión de la Comisión de Bienestar Animal.