La inflación interanual de México se aceleró en la primera quincena de junio a un 6.30 por ciento, su mayor nivel en casi ocho años y medio, principalmente por aumentos en los precios de los alimentos procesados, dijo el jueves el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
El dato rebasa el 6.16 por ciento que registró hasta la segunda quincena de mayo, y también superó el 6.25 por ciento esperado por el mercado, según un sondeo previo que realizó la agencia Reuters.
La inflación interanual alcanzada en los primeros 15 días del sexto mes del año es la más alta desde el 6.36 por ciento que registró en la primera mitad de enero de 2009. Desde enero, el indicador ha superado la cota alta del objetivo del banco central, que es de un 3.0 por ciento, más ó menos un punto porcentual.
Sin embargo, el gobernador del Banco de México ha manifestado que las expectativas de la inflación a largo plazo están “bastante bien ancladas alrededor de 3.5 por ciento”, basándose en el comportamiento de las tasas de interés de largo plazo, que se han mantenido casi estables.
En la quincena, el índice general de precios al consumidor creció un 0.15 por ciento, principalmente por aumentos en alimentos como chayote y jitomate, mientras que el indicador subyacente aumentó un 0.17 por ciento.
Analistas privados aumentaron a un 5.90 por ciento el pronóstico de inflación para el cierre de este año, según una encuesta del banco central difundida el 1 de junio.
En lo que va de 2017, Banco de México ha elevado en 100 puntos base la tasa de interés interbancaria, actualmente en 6.75 por ciento, en un esfuerzo por contener el alza sostenida de los precios.
El Banco central anunciará este jueves su decisión de política monetaria. Analistas apuestan porque la tasa clave suba otros 25 puntos a 7.0 por ciento.