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Señalaron que las autoridades ambientales aprobaron la instalación de una granja industrial a pesar de los riesgos.
Pobladores denuncian afectaciones en laguna por construcción de granja avícola. Habitantes de Actopan exigen la cancelación de un proyecto avícola que, según denuncian, presenta irregularidades en su construcción y representa una amenaza para la calidad del agua en la región de la laguna de La Mancha.
Los pobladores, quienes ya han enfrentado problemas de sequía en temporadas de altas temperaturas, señalaron que las autoridades ambientales aprobaron la instalación de una granja industrial a pesar de los riesgos que esta supone para su entorno, su salud y su economía.
Según los denunciantes, los documentos que avalan la construcción presentan omisiones y fallas que podrían ocasionar contaminación en sus fuentes de agua. Explicaron que no se han dado a conocer medidas claras para el manejo de las descargas de la granja y los lixiviados, lo que podría provocar daños severos tanto a la laguna como al litoral que recibe escurrimientos del arroyo cercano.
Aseguraron que la Secretaría de Medio Ambiente otorgó permisos de manera irregular, ya que la Manifestación de Impacto Ambiental del proyecto presenta deficiencias graves. La granja, propiedad de la empresa RS, Granos, Hortalizas y Carne S. de R.P. de R.L. de C.V., operaría bajo la razón social Granja Avícola Ecosustentable ALP Nuestra Señora de Guadalupe en la comunidad Palmas de Abajo, justo frente a La Mancha.
De acuerdo con los documentos del proyecto, la instalación consistirá en 11 naves de producción ubicadas junto al arroyo El Coyolito, cuya desembocadura conecta con la laguna La Mancha y el litoral del Golfo de México, lo que incrementa el riesgo de contaminación en estos ecosistemas.
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Los pobladores presentaron evidencia en documentos e imágenes que muestran la existencia de un corredor ripario y un escurrimiento que alimenta el manglar y la laguna, aspectos que, según denuncian, no fueron analizados adecuadamente en el estudio de impacto ambiental.
Aunque el proyecto contempla la creación de una franja de vegetación como barrera de contención, los habitantes advierten que esta medida sería insuficiente para evitar la filtración de lixiviados y escurrimientos hacia la laguna. Su principal preocupación es que la contaminación afecte un cuerpo de agua donde, durante años, se ha desarrollado la producción de mojarras, fuente de sustento para muchas familias de la zona.