Un total de 31 obispos de Chile fueron convocados a reunirse a partir del lunes 14 de mayo en el Vaticano con el Papa Francisco, en lo que se prevé sea un terremoto y mensaje inequívoco sobre los abusos sexuales
Los obispos chilenos acudirán al Vaticano con “humildad” al llamado del Papa Francisco y dispuestos a colaborar en la planificación de medidas que reparen el escándalo desatado por casos de pederastia, señaló este jueves la Conferencia Episcopal local.
La reunión de la próxima semana, en la que participarán una treintena de obispos, se anticipa como determinante para el clero chileno; podría incluir la remoción de varios jerarcas y un mensaje de intolerancia por parte del papa sobre los abusos sexuales.
“Con humildad y esperanza acudimos al llamado del sucesor de Pedro”, señala el comunicado difundido en Santiago.
Un total de 31 religiosos llegarán al Vaticano cumpliendo un llamado del pontífice en una carta en la que reconoció haber “incurrido en graves equivocaciones de valoración y percepción de la situación, especialmente por falta de información veraz y equilibrada” desde Santiago.
Antes de su partida, los jerarcas católicos valoraron el reciente encuentro del papa argentino con tres víctimas de abusos sexuales del sacerdote chileno Fernando Karadima, un caso que puso en el ojo de la tormenta a la iglesia chilena y en especial al obispo Juan Barros, prelado de Osorno a quien se le acusa de encubrir a Karadima.
La actitud del Papa de acoger a las víctimas James Hamilton, Juan Carlos Cruz y Juan Andrés Murillo “marca un ejemplo y nos muestra el camino que la Iglesia chilena está llamada a seguir ante las denuncias de abuso de conciencia, abuso sexual y, en definitiva, frente a todo abuso de poder que pueda ocurrir al interior de nuestras comunidades”, agrega el documento.
Barros está acusado de encubrir los abusos sexuales reiterados de Karadima, condenado en 2011 por el Vaticano a una “vida de oración y penitencia” luego de que la justicia local declarar prescriptos los cargos de abuso sexual.
Varios miembros de la iglesia local y expertos esperan que Francisco cese a varios obispos, incluido Barros, y que ordene una profunda reorganización de la jerarquía eclesiástica chilena. El apoyo que Francisco dio a Barros opacó su visita a Chile en enero.
Imagen: @vaticannews_es
Se modificará formación sacerdotal para evitar casos de pederastia