A partir del próximo 8 de julio, los habitantes de la Ciudad de México tendremos la obligación de separar la basura en tres partes.
Estos cambios se deben a la entrada en operación la norma ambiental NADF-024, con la que se busca un mejor aprovechamiento para el reúso de los residuos sólidos que a diario se generan en la capital.
Las cifras del gobierno capitalino indican que a diario cada habitante de la capital genera un promedio de kilo y medio de desechos, de los cuales 30% es material que puede ser reciclado; siempre y cuando se separe adecuadamente como papel, cartón, empaques, bolsas o vidrio.
La separación de residuos se tendrá que hacer en tres recipientes:
- Inorgánicos reciclables: poseen un valor que los hace susceptibles a volver a utilizarse. Estos pueden ser casi todos los envases o materiales como plásticos, aluminio, hojalata de acero, cartón laminado, vidrio, madera, ropa y textiles.
- Inorgánicos no reciclables: No se pueden volver a utilizar. Por ejemplo, los cepillos de dientes, los zapatos o los tenis, que, aunque parecieran de un material reutilizable ya no se pueden reciclar. En esta clasificación también se encuentran productos como preservativos, cotonetes y curitas; unicel, calzado, colillas de cigarro, toallas sanitarias y pañales; papel de baño, así como bolígrafos y lápices.
- Basura orgánica: Se pueden encontrar los desperdicios de comida, como huesos, jardinería y residuos de preparaciones. Además de restos de verduras y frutas, de jardinería, de café y té, cascarón de huevo, pan o tortillas, huesos y lácteos sin envase.
De acuerdo con la Secretaría de Medio Ambiente, en las colonias donde no pasen camiones con dos compartimentos, la recolección de basura será por días establecidos, continuando como ya se hace actualmente.
Lunes miércoles y viernes, los camiones recolectarán los residuos inorgánicos con potencial de reciclaje y los no reciclables.
Los martes, jueves y sábados se recogerá la basura orgánica.
Los domingos se llevarán los residuos voluminosos de manejo especial y los inorgánicos reciclables y no reciclables.