En Corea del Norte, con el objetivo de inculcar a los jóvenes la lealtad a las autoridades, en especial a Kim Jong Un, así como un espíritu basado en la defensa de su nación odiando al imperialismo y a los enemigos de su país, los menores de edad festejaron el Día del Niño cumpliendo con una serie de retos de corte militar con réplicas de granadas y rifles AK-47, todo ello, bajo los ánimos de su dictador.
Fue el mismo líder supremo Kim Jong-un quien les envió un mensaje a los pequeños en el que pidió “odiar a los imperialistas y enemigos” y “darlo todo” por su patria.
La jornada de juegos se basó en distintos retos, entre ellos, uno en el que los pequeños tenían la misión de lanzar una granada para derribar a los enemigos que osan entrar a su nación.
Otro juego fue una carrera de obstáculos en la que los menores debían cargar una réplica del rifle AK-47 mientras los padres de familia y maestros los alientan para que no se rindan y completen la prueba.
Durante los festejos, una profesora declaró: “Tiré la granada de mano pensando que iba a derribar a todos los enemigos que tratan de infiltrarse en nuestro país”.
Por otro lado, un estudiante de primaria dijo: “Quiero defender al respetado líder supremo Kim Jong Un con poder militar”.
De acuerdo con la agencia local de noticias, KCNA, el festejo terminó con un baile de los estudiantes en honor al líder norcoreano.