Se retirará el próximo domingo con un emotivo homenaje y a partir del lunes iniciará una consulta ciudadana para decidir cuál será la especie que la suplirá
La emblemática palmera de la Glorieta de la Palma, ubicada en Paseo de la Reforma, en la zona centro de la Ciudad de México (CDMX), se encuentra gravemente afectada por la plaga del amarillamiento que terminó por matarla, por la que será retirada del lugar.
Al respecto, la jefa de Gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum, confirmó este jueves el estatus del ejemplar y confirmó que éste será retirado.
Autoridades capitalinas informaron este jueves sobre los trabajos que se están llevando a cabo durante la presente administración para el saneamiento de árboles y palmeras que se encuentran en esta entidad y que durante los últimos años han sido atacados por plagas.
La secretaria de Medio Ambiente capitalina, Marina Robles, señaló que es un ejemplar que tiene aproximadamente 100 años y que se colocó en ese sitio a principios del siglo XX.
Debido a que el ejemplar es insalvable, la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum Pardo indicó que se retirará el próximo domingo con un emotivo homenaje y a partir del lunes iniciará una consulta ciudadana para decidir cuál será la especie que la suplirá.
“Lamentablemente la palma de la Glorieta de la Palma tiene un hongo, (…) lo que se hizo es contactar a los expertos, y en particular en la glorieta se estuvo trabajando para poder salvarse, pero no pudo salvarse, es un elemento histórico en la Ciudad de México”, dijo
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Hoy, el declive general en la condición de salud de la palmera que, según historiadores fue plantada hace más de 100 años en la esquina con Avenida Niza, es evidente; la copa de la palma se encuentra completamente seca y muchas de sus hojas se pueden encontrar esparcidas en el suelo.
Sin embargo, el ejemplar de la Glorieta de la Palma no es el único que se ha visto afectado. De acuerdo con datos de la Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México (Sedema), existen registros de mortalidad de palmeras en la capital del país desde 2011.
A raíz de esto, el Colegio de Posgraduados de la Universidad Autónoma de Chihuahua (UACh) efectuó un estudio en 2015, en el que se detectó un hongo en el suelo que ocasionaba la muerte de palmeras.
Para 2019, con base en análisis de laboratorio, la Sedema detectó la presencia de cinco hongos y dos bacterias más en las palmeras; siete se ubican en el suelo y un hongo en las hojas de las palmeras afectadas.
Como solución, el gobierno capitalino arrancó el pasado 7 de abril el proyecto ‘Estado de salud y manejo integrado de palmeras de la CDMX’, que consiste en la toma de muestras de suelo, raíz, tallo y hojas para identificar el agente causal de la declinación y muerte de las palmeras.
Arranca proyecto “Estado de salud y manejo integrado de palmeras de la Ciudad de México”. Foto: Secretaría de Medio Ambiente
Estas actividades se realizan a la par del plan de manejo integral de palmeras y control de muérdago, que inició en enero de este año, a través del cual se realiza la poda sanitaria, reforzamiento nutricional, aplicación de microorganismos antagónicos a patógenos del suelo, endoterapia vegetal, trampeo de insectos, descompactación del suelo y sustitución de palmeras muertas.
Cabe recordar que la primera etapa del plan de manejo integral abarca 12 mil 400 palmeras de cuatro alcaldías (Miguel Hidalgo, Cuauhtémoc, Benito Juárez y Coyoacán).
La reacción tardía por parte de las autoridades, empero, no pudo evitar la pérdida de muchos de estos ejemplares. Según datos compartidos por la Sedema, hasta principios del mes de abril se han derribado más de 140 palmeras.
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CAB