Según las historias, se cree que la muñeca está poseída por el espíritu de una novia abandonada y ha ganado el título de la “más embrujada” del mundo, tras agredir a 17 hombres.
Las muñecas embrujadas son un tema fascinante y a menudo inquietante en el folclore y las historias de terror. Estos objetos, frecuentemente vinculados a relatos de fantasmas y fenómenos paranormales, capturan la imaginación de muchas personas.
Annabelle es probablemente la muñeca embrujada más conocida, supuestamente poseída por un espíritu maligno. La historia de Annabelle se ha popularizado gracias a las películas de “El Conjuro” y su propia serie de películas. Según los investigadores paranormales Ed y Lorraine Warren, la muñeca ha estado involucrada en varios incidentes inexplicables y peligrosos.
Sin embargo, historias como esta podrían no ser tan descabelladas, ya que recientemente ha salido a la luz el caso de una muñeca embrujada que ha causado daño a las personas.
La historia de esta muñeca, llamada Elizabeth, empieza cuando Lee Steer, un investigador de fenómenos paranormales de 37 años, la adquirió en eBay para exhibirla en su Museo de Objetos Embrujados en Rotherham, South Yorkshire, después de escuchar a unos hombres hablar sobre el temido y endemoniado juguete.
Según las historias contadas por los hombres, se cree que esta muñeca está poseída por el espíritu de una novia abandonada y ha ganado el título de la “más embrujada” del mundo, tras agredir a 17 hombres.
Incluso Lee Steer afirma haber sido víctima del juguete espectral, describiendo que el fantasma arañó su espalda formando un pentagrama. Además, sostiene tener un video en el que se muestra a Elizabeth tirando de la camisa de un hombre.
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Además, otros 15 hombres han afirmado haber sido arañados por el aterrador objeto, que no solo se limita a lastimar a las personas, sino que también ha activado alarmas de incendio, movido objetos en la habitación y corrompido electrónicamente los videoclips en los que ha aparecido.
Lee explica que, en presencia de mujeres, Elizabeth tiende a mover objetos por la habitación o a encender y apagar las luces. En contraste, con los hombres ocurre algo completamente diferente: ellos son agredidos.
Según Lee, las travesuras de Elizabeth han aumentado desde que adquirió artefactos de la exitosa serie de películas de terror “El Conjuro”. Al parecer, la muñeca está empezando a sentir celos por no recibir toda la atención.
Por ahora, Elizabeth permanece en el Museo de Objetos Embrujados en Rotherham, South Yorkshire, donde Lee espera que atraiga a más visitantes con su intrigante historia, o que, con suerte, logre controlar la furia del juguete.
Las muñecas embrujadas son un elemento frecuente en películas de terror, libros y series de televisión. Su apariencia inocente pero inquietante las convierte en el recurso perfecto para generar una atmósfera de miedo y suspenso.
