El impuesto digital acordado en el seno del G20 supondría una mayor carga fiscal para las grandes empresas multinacionales
Los ministros de Finanzas del G20 acordaron el domingo redactar una nueva normativa común para acabar con las lagunas legales utilizadas por los gigantes tecnológicos mundiales, como Facebook, para reducir el pago de impuesto digital, según reveló una versión final del comunicado del grupo.
Facebook, Google, Amazon, y otras grandes empresas tecnológicas se enfrentan a las críticas por reducir el pago de impuestos mediante la facturación de beneficios en países con baja carga fiscal, independientemente de la ubicación del cliente final. Lo que se considera por muchos como injusto.
La nueva normativa supondría una mayor carga fiscal para las grandes empresas multinacionales, pero también dificultará la atracción de inversiones extranjeras directas a países como Irlanda, con la promesa de unas tasas impositivas a las empresas muy bajas.
“Acogemos con agrado los recientes avances en la resolución de los problemas fiscales derivados de la digitalización y respaldamos el ambicioso programa basado en dos pilares”, mostró la versión final del comunicado emitida el domingo. “Redoblaremos nuestros esfuerzos para conseguir una solución de consenso para el 2020”.
A High Level Public-Private Roundtable was held in #Tokyo, #Japan on
— G20 Japan ?? (@g20org) 7 de junio de 2019
June 7, ahead of the G20 Ministerial Meeting on Trade and Digital Economy, held in Tsukuba city from June 8 to 9. #G20Summit #G20Japan #G20Osaka #G20大阪サミット pic.twitter.com/lO2ee1LVZr
Reino Unido y Francia han estado entre los más firmes defensores de las propuestas para gravar a las grandes empresas de tecnología, las cuales se centran en dificultar el traslado de los beneficios a las jurisdicciones con tipos impositivos más bajos, y en la introducción de un impuesto de sociedades mínimo.
Esto ha llevado a los dos países a enfrentarse con Estados Unidos, que ha expresado su preocupación por el hecho de que las empresas estadounidenses de Internet están siendo injustamente atacadas en un amplio intento de actualizar el marco tributario mundial sobre el impuesto de sociedades.
Las grandes empresas de Internet afirman que respetan las leyes tributarias, pero pagan pocos impuestos en Europa, normalmente canalizando las ventas a través de países como Irlanda y Luxemburgo, que cuentan con regímenes fiscales menos estrictos.
El debate del G20 sobre los ajustes en el régimen tributario se centra en dos pilares que podrían ser un doble golpe para algunas empresas.
6/8~9に開催中の #G20 貿易・デジタル経済大臣会合に関連し、デジタル社会の進展を紹介するサイトを公開!https://t.co/grqTskLGsf
— 経済産業省 (@meti_NIPPON) 8 de junio de 2019
データ共有・活用が進むと、私たちの暮らしがどのように変わるのか
イメージ動画も紹介しています 是非ご覧ください! #G20_digital pic.twitter.com/tDGmD4phmk
El primer pilar consiste en dividir los derechos de gravar a una empresa cuando distribuye sus bienes o servicios aunque no tenga presencia física en ese país.
Si las empresas siguen siendo capaces de encontrar una forma de registrar los beneficios en territorios con bajo nivel impositivo o en paraísos fiscales, los países podrían entonces aplicar un tipo impositivo mínimo global que se acordaría en el marco del segundo pilar.
A principios de este año, los países y territorios acordaron una hoja de ruta destinada a revisar la normativa fiscal internacional que se ha visto superada por el desarrollo del comercio digital.
Contenido relacionado
Francia cobrará desde enero un impuesto a los gigantes de Internet