Como parte de su serial, “México, el país de las fosas”, nuestro colaborador Efrén Argüelles nos presentó el caso del señor Guadalupe Contreras, procedente de Iguala, Guerrero, quien sin perder la esperanza de encontrar a su hijo, ha recorrido cientos de kilómetros en diferentes estados de la República.
En esta ocasión, acudieron a Colinas de Santa Fe, en Veracruz, donde encontraron lo que podría considerarse un cementerio clandestino, lugar al que para tener acceso, tuvieron que esperar tres horas. Ya adentro, el señor Guadalupe les contó cómo en su búsqueda fue encontrando cuerpos sin vida. Búsqueda que realiza enterrando la punta de una varilla en la tierra para después olerla, forma en la que ha encontrado más de 253 muertos.
El testigo asegura que los buscadores de fosas no buscan culpables, sino a sus familiares.