López Obrador indicó aseguró que le fue bien en el tercer debate presidencial, que sus adversarios no pudieron pese a que se dedicaron a atacarlo, saliendo ileso de la calumnia, pero no se echará a la hamaca
Andrés Manuel López Obrador, candidato de la coalición Juntos Haremos Historia a la Presidencia, rechazó que haya existido “algo chueco u oscuro” en la asignación de obra concedida a la empresa del arquitecto José María Rioboó cuando fungió como jefe de gobierno en la Ciudad de México, tal y como lo sostuvo su adversario del PAN, Ricardo Anaya, en el tercer debate presidencial.
Al continuar de gira por Yucatán, López Obrador reveló que previo a asignar el contrato para la construcción de la cimentación de los segundos pisos, el proyecto se sometió a varias auditorías, después de las cuales fue elegido “en el marco de la ley” como el mejor, puesto que fue elaborado por uno de los mejores estructuralistas del mundo.
“Para que tengan una idea, él fue el que hizo todo el proyecto de la estructura, de la cimentación de los segundos pisos; es tan bueno que esos segundos pisos han resistido temblores y no han tenido ningún problema”, detalló el tabasqueño luego de encabezar un mitin en Ticul, Yucatán.
El candidato presidencial dijo que desconoce por qué Anaya Cortés hizo referencia a este hecho, pues también en el Estado de México se contrató a la empresa de Rioboó para el mismo propósito.
“La empresa española que hizo los segundos pisos en el Estado de México, lo contrató también a él para hacer él mismo proyecto, no hay nada absolutamente chueco u oculto”, afirmó.
Ante los medios, López Obrador contó que fue en principio a Manuel Camacho Solís, a quien un grupo de ingenieros le presentó el proyecto para hacer los segundos pisos, pero lo rechazó y fue tiempo después que el tabasqueño se interesó en el proyecto, luego de que la comunidad judía en una reunión le formuló este plan como parte para resolver el problema vial de la Ciudad de México.
Al conocer la propuesta de los segundos pisos se enteró que Rioboó junto con otro arquitecto participaron en el diseño original de la obra.
“Cuando decidimos hacer los segundos pisos, esta empresa tenía la especialidad y por eso se le entregó este contrato y fue auditado muchas veces y el fideicomiso que manejó el dinero de los segundos pisos, que yo construí, estaba en Banobras y Felipe Calderón era el director de Banobras, no tengo nada de qué avergonzarme”, puntualizó.
Aclaró que este miércoles explicó lo del contrato de Rioboó porque “en el debate se le acaba el tiempo y Anaya “es muy hipócrita con risa postiza”.
A pesar de todo lo que dijo en contra mía, no logró hacerme daño y salí “bien librado” del debate, subrayando que de todas maneras seguirá haciendo su campaña, no se echará a la hamaca, no se acostará a la hamaca.
“Vamos a seguir recorriendo el país como empezamos, incluso hasta con más intensidad, porque ya vamos con los cierres, y vamos a estar en dos, tres capitales de estados en un día”, detalló.
A la pregunta de si hubo o no competencia suficiente en la campaña, López Obrador estimó que el punto de quiebre fue que los integrantes de la mafia del poder no lograron ponerse de acuerdo.
Imagen: @lopezobrador_
Con información de Isabel González
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