Esperando 300 mil visitantes y una derrama económica de 50 millones de pesos, habrá todo tipo de enchilada y a precios accesibles
Este viernes se inauguró la XVII Feria de la Enchilada Iztapalapa 2019, en la que 50 expositores ofrecerán 300 variedades de este platillo en la Macroplaza del Jardín Cuitláhuac.
Durante el acto oficial, la alcaldesa Clara Brugada Molina invitó a toda la población del Valle de México a acudir a esta fiesta que se ha vuelto una tradición metropolitana y que abre sus puertas desde hoy y hasta el 29 de septiembre, de 9:00 a 21:00 horas.
Esperando 300 mil visitantes y una derrama económica de 50 millones de pesos, habrá enchiladas de mole negro, de carne de mantarraya en salsa de sandía, enchiladas bañadas con salsa de Jamaica, de ahuautle –comida ancestral de Iztapalapa–, de camarón y de pato, entre otras muchas variedades, y a precios accesibles.
Acompañada por la representante del Fondo Mixto de Promoción Turística de la Ciudad de México, Karla Marie Gutiérrez Ahrensburg, la alcaldesa destacó que además de recuperar las raíces gastronómicas del Valle de México, basadas en la combinación de maíz y chile, la feria también tiene el objetivo de impulsar la economía y el turismo en Iztapalapa como una forma de captar recursos para la población local.
“Hoy la Feria de la Enchilada no sólo es de Iztapalapa, sino que se ha consolidado como una experiencia gastronómica metropolitana; acuden a ella personas de todas partes del Valle de México, que cada año la esperan y vienen a deleitarse con estos sabores”, por eso ha alcanzado trascendencia cultural, económica y turística, afirmó.
Recordó que el miércoles 25 de septiembre se realizará la final del concurso de la enchilada más sabrosa de la Ciudad de México en sus categorías de aficionados y chefs profesionales, donde se premiará el platillo con mejor sabor y representatividad de la tradicional comida mexicana.
Destacó que la Feria es un reconocimiento a la combinación del chile y el maíz, y en la defensa de este último anunció que en 2020 promoverá el cultivo de este grano, de una especie criolla, en zonas como la sierra de Santa Catarina, con el propósito de que, por ejemplo, el producto sea una de las materias primas de la próxima Feria de la Enchilada.
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