Haizea Ibarretxe publicó en sus plataformas digitales un vídeo relatando los extraños eventos que siguieron a su atragantamiento mientras comía jamón.
Una joven de 21 años llamada Haizea Ibarretxe, oriunda de una pequeña ciudad en el País Vasco (España), pasó por momentos angustiantes luego de decidir comer unas rebanadas de jamón cocido en su casa. Lo que inicialmente parecía una merienda común se tornó en una situación inusual que la llevó a terminar en urgencias después de tragarse accidentalmente su cepillo de dientes.
En sus redes sociales, la joven compartió un video relatando los eventos surrealistas. Haizea explicó que todo iba bien hasta que tuvo problemas para tragar el último trozo de jamón, quedándose atascado en su garganta y dificultándole la respiración. Desesperada, fue al baño intentando sacar la comida con las manos, pero no lo logró, y la sensación de ahogo empeoraba.
En TikTok, dijo: “Estaba desesperada”. En un intento por despejar su garganta, agarró su cepillo de dientes. Sin embargo, la maniobra salió mal: terminó succionando el cepillo y no pudo recuperarlo. Aunque ya no se estaba ahogando y podía respirar con normalidad, ahora se enfrentaba a otro problema.
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La joven tuvo que aguardar tres horas en casa hasta que su madre regresó del trabajo y pudo llevarla a urgencias en Galdakao, en las afueras de Bilbao, dado que su padre no podía conducir debido a una lesión en el tendón de Aquiles. En el hospital, al principio, los enfermeros mostraron escepticismo frente a la historia hasta que las radiografías confirmaron la presencia del cepillo.
Después de ser sedada, la operación, que duró 40 minutos, fue completamente exitosa. Haizea despertó con el cepillo de dientes colocado en una bolsa junto a su cama, como un peculiar “trofeo”. Según el informe médico, el cepillo medía “más de 20 centímetros de longitud” y fue retirado “sin evidencia de lesiones traumáticas”.