La huelga es parte de una escalada de las manifestaciones lideradas por los adversarios del mandatario socialista desde abril y en medio de las cuales han muerto al menos 103 personas.
En el este de Caracas, un bajo tránsito de vehículos y escasos transeúntes marcaron el inicio de la jornada, mientras en otras zonas comerciales se evidenciaba un mayor flujo de personas en comparación con una paralización de 24 horas realizada la semana pasada.
Al otro lado de la ciudad se observaban filas en agencias bancarias, vendedores ambulantes y muchos comercios abiertos en la popular barriada de Catia, mientras que el transporte subterráneo de Caracas reportaba afluencia normal de pasajeros.
Estoy de acuerdo con el paro. La semana pasada cerré toda la semana, por miedo que pasara algo. Pero ahora necesito abrir para poder comer”, comentó Isabel Fernández, vendedora de verduras en Catia.
La televisión estatal mostró imágenes de normalidad en los servicios de transporte y empresas estatales, mientras adversarios de Maduro publicaban fotos en redes sociales de calles desoladas en varias ciudades del país.
El presidente de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), Eulogio del Pino, dijo en su cuenta de la red social Twitter que las operaciones permanecían sin novedad, con total afluencia de sus trabajadores.
En tanto, opositores denunciaron en la misma red social, que la policía ya había realizado algunas detenciones en medio de la protesta, mientras afirmaban un éxito de la paralización en estados como el fronterizo Táchira y Barinas.
La oposición ha prometido intensificar las manifestaciones si el Gobierno insiste en celebrar el domingo la elección de los 545 constituyentes que redactarán una nueva carta magna y en cuyas manos, según Maduro, está el retorno a la paz en el país.
El líder opositor Leopoldo López, quien no había aparecido desde que se le otorgó el beneficio de arresto domiciliario tras más de tres años en presidio, emitió un mensaje en video llamando a los adversarios mantenerse en la lucha.
El dirigente afirmó que si su arenga “representa un riesgo para que me devuelvan a una celda (…) yo estoy dispuesto a asumir ese riesgo”.
Líderes opositores dicen que, con la Constituyente, Maduro busca suprimir las elecciones -incluidas las presidenciales de fines del 2018- y tomar el control de todos los poderes públicos, entre ellos, el Congreso -en manos opositoras- y la Fiscalía, cuya jefa rompió con el Gobierno.
La semana pasada, la oposición realizó un paro de 24 horas, que dijo fue acatado en un 85 por ciento en las principales ciudades del país. No obstante, la jornada desencadenó violentas protestas que dejaron cinco fallecidos.
La ciudad occidental de Punto Fijo, donde se ubica del mayor complejo refinador petrolero del país, permanecía con normal flujo de autos y personas, pese a que las organizaciones sindicales de la zona esperaban un gradual cambio durante la jornada.
“Quién va a arriesgar el trabajo en estos momentos, yo tengo hijos y tengo que salir adelante como sea por ellos”, dijo Elio Jiménez un operador de 40 años del Complejo Refinador Paraguaná.
Sin embargo, la oposición reportó en la localidad una docena de detenidos por enfrentamientos con la policía por un cierre de una vía.
Tras la huelga del miércoles y jueves, la oposición prevé movilizar a sus partidarios a Caracas para protestar en las calles de la capital, en un último esfuerzo por evitar la votación del domingo, donde se han negado a participar.
Fuentes en Estados Unidos dijeron el miércoles que el gobierno de Donald Trump tiene previsto anunciar nuevas sanciones contra 13 funcionarios venezolanos, aunque no incluiría medidas económicas o contra el sector petrolero.
Por su parte, la Organización de Estados Americanos (OEA) sostenía una sesión en la que discutiría la situación en Venezuela.
Pese a las críticas en casa y desde el extranjero, Maduro ha prometido celebrar la Constituyente que ve como la vía para incluir los populares subsidios en la carta magna, e instaurar una economía postpetrolera que permitiría al país librarse de la dependencia de sus exportaciones de crudo.
CARACAS.