Dolores Olmedo nació un 14 de diciembre de 1908 y a los 17 años tuvo su primer contacto con el artista mexicano Diego Rivera quien completó 27 bocetos de Olmedo y estableció una conexión de por vida
Dolores Olmedo nació un 14 de diciembre de 1908 y a los 17 años tuvo su primer contacto con el artista mexicano Diego Rivera quien completó 27 bocetos de Olmedo y estableció una conexión de por vida, pero desde muy joven convivió con intelectuales de esa época: poetas del grupo de los Contemporáneos – Salvador Novo y Xavier Villaurrutia-, escritores como Jaime Torres Bodet; filósofos entre los que se contaban José Vasconcelos y Antonio Caso; músicos como Julián Carrillo, Luis Sandi, Manuel M. Ponce y Carlos Chávez.
En su blog, la compañía de Mountain View reseñó que durante la década de 1940, Olmedo se convirtió en una exitosa promotora inmobiliaria, una de las primeras mujeres mexicanas en sobresalir en el campo, con lo que obtuvo los fondos suficientes para mudarse a una finca en Xochimilco, al sur de la Ciudad de México.
Agregó que en la década de 1950, Rivera le vendió docenas de sus propios cuadros y dibujos, así como 25 obras de su esposa Frida Kahlo, con la esperanza de que la obra permaneciera en su tierra natal.
Así se fundó Museo Dolores Olmedo que abrió sus puertas en septiembre de 1994, dentro de su residencia de piedra del siglo XVI, anteriormente conocida como Hacienda La Noria, en donde se expone toda su colección pictórica, prehispánica y popular.
Google destacó que el museo también es un punto central para las celebraciones del Día de los Muertos, ya que Olmedo organizaba ofrendas en honor a Diego Rivera.
La colección del museo incluye una amplia gama de obras de Rivera a lo largo de las muchas décadas de su carrera, así como la colección más grande del mundo de pinturas e ilustraciones de Kahlo de Angelina Beloff, quien trabajó con Rivera en Europa a principios del siglo XX.
“Siempre defenderé su trabajo con energía “, escribió sobre Diego Rivera en el catálogo de su museo y cumplió su palabra.
Dolores Olmedo falleció el 27 de julio de 2002 en la ciudad de México, a los 93 años de edad, dejando el legado de una promotora de la cultura en toda la extensión de la palabra, logrando lo que todo mecenas aspira a lograr: ayudar al arte a trascender y, al mismo tiempo, trascender él mismo; ayudar a perpetuar la obra de un artista y perpetuarse junto con él.