Google despidió a un ingeniero que ha estado en el ojo del huracán en Silicon Valley en la última semana tras escribir un memorando en el que atribuyó la desigualdad de género en la industria tecnológica a diferencias biológicas.
James Damore, el ingeniero que escribió el memorando, confirmó el despido y dijo en un correo electrónico que había sido despedido por “perpetuar estereotipos de género”.
Damore dijo que estaba estudiando todas las acciones legales posibles y que, antes de ser despedido, presentó una denuncia ante el consejo nacional de relaciones laborales de Estados Unidos (NLRB, por sus siglas inglesas) acusando a la alta dirección de Google de avergonzarle para intentar mantenerle en silencio.
“Es ilegal ir en contra de un denunciante ante el NLRB”, señaló en el correo electrónico.
Google, filial de Alphabet Inc con sede Mountain View, California, dijo que no podía hablar sobre casos individuales de empleados.
El presidente ejecutivo de Google, Sundar Pichai, dijo a los empleados en una nota el lunes que partes del memorando anti-diversidad “violan nuestro Código de Conducta y cruzan la línea al promover dañinos estereotipos de género en nuestro lugar de trabajo”, según una copia de la nota a la que tuvo acceso Reuters.
No estaba claro de inmediato a qué autoridad legal podría acudir Damore. Los empleados no sindicados como ocurre con la mayoría de los trabajadores del sector tecnológico pueden ser despedidos en Estados Unidos por una amplia variedad de razones que no tienen nada que ver con el rendimiento.
La ley laboral estadounidense garantiza a los trabajadores, independientemente de que estén o no afiliados a un sindicado, el derecho a tomar “actividades concertadas” para ayudarse o protegerse mutuamente.
En cualquier caso, Damore probablemente tendrá complicado lograr protección en base a su memorando, dijo Alison Morantz, una profesora de Derecho de la Universidad de Stanford con experiencia en derecho laboral.
“Va a ser difícil vender que esta actividad era concertada o dirigida a ayuda o protección mutua … enfrentar a un grupo de trabajadores contra otro no suena muy ‘mutuo'”, dijo Morantz.
El debate sobre el trato a las mujeres en Silicon Valley, dominado por hombres, lleva meses sobre la mesa tras escándalos de acoso sexual en Uber Technologies Inc y en varias firmas de inversión que han terminado en reorganizaciones directivas.
Los directivos de las mayores empresas tecnológicas, Google entre ellas, se han comprometido públicamente a una mayor diversidad en las plantillas, aunque el porcentaje de mujeres en puestos de ingeniería o gestión sigue siendo bajo en muchas compañías.
El Departamento de Trabajo estadounidense está investigando si Google ha pagado de forma ilegal menos a las mujeres que a los hombres, algo que el gigante tecnológico niega.
Damore afirmó en el documento de 3,000 palabras que circuló dentro de la compañía la semana pasada que “el sesgo hacia la izquierda de Google ha creado una monocultura de lo políticamente correcto” que impide una debate honesto sobre la diversidad.