
Minnie West y Diego Klein estrenan la comedia romántica ‘Loco por ella’; los actores hablaron de las depresiones que han vivido
Además de haber generado una química instantánea en el callback de Loco por ella, que es un paso previo al comienzo de la filmación, Minnie West y Diego Klein se sintieron sumamente cercanos a la historia planteada en esta comedia con tintes dramáticos, pues al igual que en la trama, ellos han experimentado en sus vidas una depresión profunda que les hizo ser conscientes de la importancia de la salud mental y de lo necesario que es que la gente sepa más del tema para evitar los lugares comunes de “No estés triste” o “Échale ganas”.
“Cuando murió mi mamá, todo el mundo me cuestionaba todo lo que estaba haciendo, el porqué me interné en un psiquiátrico, el porqué estaba tomando pastillas, el porqué no me levantaba a hacer cosas o ejercicio, que el tiempo me iba a ayudar y por supuesto que nada de lo que me decían me funcionaba, por eso cuando leí el guion de Loco por ella vi que era como educar a las personas para que puedan acercarse a quienes están viviendo lo que yo estoy viviendo y desde un lugar más consciente, menos invasivo y menos crítico”, compartió Minnie West a Excélsior.
De hecho, tras la muerte de su mamá, la diseñadora Amparo Serrano, Minnie West cayó en un estado de depresión profunda que le llevó a pensar que no iba a volver a actuar hasta que el director Rodrigo Nava le ofreció protagonizar Loco por ella, cinta en la que le da vida a Carla, una chica con trastorno bipolar de la cual se enamora Álvaro, interpretado por Klein.
Así como West compartió su experiencia con la depresión, de la cual ha aprendido a vivir “un día a la vez”, el actor habló del momento en que fue consciente sobre las enfermedades de salud mental.

“Yo tuve una depresión muy fuerte como a los 22 años, cuando me fui a vivir a Madrid, e incluso tuve ataques de pánico, mucha ansiedad y fue muy difícil porque no sabía lo que era. Cuando tuve un poquito más de conocimiento me relajé y dije: ‘bueno, no estoy loco’, pero cuando me dio mi primer ataque de pánico sí pensé que lo estaba, pues tenía mucho desconocimiento. A partir de eso comencé a crear mucha conciencia y pensé que si yo hubiera sabido esto antes, si yo hubiera tenido más información sobre todo este tema y mucho más joven, lo hubiera enfrentado de una manera distinta definitivamente”, compartió Diego Klein, también actor de Con esa misma mirada, remake de la telenovela Mirada de mujer.
Loco por ella, adaptación de la comedia romántica española estrenada en 2021, cuenta la historia de Álvaro, un periodista que conoce en un bar a Carla y pasa con ella lo que él define “la mejor noche de su vida”. Al haber pasado una noche alocada con ella, se da a la tarea de buscarla en todas las redes, hasta que encuentra en la chamarra que ella olvidó una dirección que resulta ser un psiquiátrico. Álvaro ingresa a la clínica como paciente con tal de volver a estar con Carla, al mismo tiempo que encuentra información de primera mano para hacer un reportaje al conocer a diferentes pacientes que viven con una enfermedad mental.
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En cierta forma, Diego, con todos sus prejuicios y frases motivacionales, representa al grueso de la sociedad que vive desinformada y ajena a las enfermedades mentales.
“A mí me gustó la idea de poder contar esta historia porque yo tengo mucha impotencia de cómo le puedo explicar a las personas que nunca van a estar en mi posición o en la de alguna otra persona con alguna enfermedad mental porque aunque vivan algo igual, nadie sabe lo que el otro siente”, relató West, de 32 años, y quien empezó su carrera hace cinco lustros.
A casi tres años de haber perdido a su madre, quien cayó de un balcón de manera accidental, Minnie sigue en proceso de recuperación, atendiendo su salud mental y compartió en qué momento de su vida se encuentra.
“Siento que hay un pre y un post de mi persona por completo. La muerte de mi madre me puso las cosas en perspectiva, me sacudió todo y me hizo valorar lo que realmente importa. Hay cosas tan tontas por las que antes me preocupaba tanto y me di cuenta que lo único que no se puede arreglar es la muerte. La muerte (de alguien que amas) te hace mucho más profunda, mucho más empática, te hace madurar en tres segundos.
“Ahora trato de aplaudirme los logros por más estúpidos que parezcan como levantarme de la cama, vestirme para salir a hacer ejercicio o lo que sea. Para mí el estar aquí, hablando contigo, toma mucho esfuerzo y estoy intentando aplaudirme estas cosas chiquitas y vivir el aquí y ahora”, remató la actriz de la cinta Me gusta, pero me asusta.