La depresión requiere ayuda profesional, no atenderla pone en gran riesgo a quien la padece, sin embargo, existen paliativos naturales
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más del 4% de la población mundial vive con depresión, y los más propensos a padecerla son las mujeres, jóvenes y ancianos.
La depresión es la enfermedad del siglo XX que afecta a más de 350 millones de personas en el mundo y se estima que para el 2020, sea la segunda causa de discapacidad, sólo después de las enfermedades cardiovasculares.
Este trastorno se caracteriza por la presencia de tristeza, pérdida de interés o placer, sentimientos de culpa o falta de autoestima, trastornos del sueño o del apetito, sensación de cansancio y falta de concentración. Puede llegar a ser crónico y en su forma más grave puede conducir al suicidio.
La condición es grave y requiere atención medica, se debe evitar la automedicación, así como frases trilladas a quien la padece, pues no es algo que controlen.
Existen plantas y remedios naturales que pueden ser paliativos de los síntomas y complementar al tratamiento alópata, más no sustituirlo.
Joseph Firth, científico de la Universidad de Western Sydney, determinó que nuestra alimentación puede ayudarnos a aumentar o reducir los síntomas de depresión y ansiedad.
De acuerdo con la investigación de Firth, los pacientes con depresión tienen un factor repetitivo, desequilibrios bioquímicos. Principalmente de serotonina, la cual se encarga de mantener la salud mental.
Qué se debe y qué no se debe consumir
Reducir el consumo de carnes es muy importante, pues la carne grasa es la que en su mayoría incrementa los episodios de depresión.
También debe reducirse considerablemente la ingesta de carbohidratos, grasas saturadas, endulzantes artificiales y azúcar refinada.
Los alimentos procesados y comida rápida tampoco favorecen esta situación, ya que aumentan el riesgo de desarrollar depresión, pues contienen sustancias químicas que favorecen las enfermedades cardiovasculares e inflamación.
Los lácteos altos en grasa, principalmente quesos añejos, además de ser altos en sodio son altísimos en grasas de tipo Trans, se ha encontrado relación entre el consumo de grasas trans y saturadas con el desarrollo de depresión.
Estos alimentos están constituidos de un exceso de grasas Trans y Saturadas (por su origen animal), que aumentan la producción de determinadas moléculas que desencadenan el mal funcionamiento de las neuronas. Las llamadas citoninas que interfieren en la transmisión nerviosa y pueden reducir la producción de serotonina, responsable de la sensación de bienestar.
Al menos por un tiempo se deben dejar del lado los estimulantes como el café, té, refrescos con cafeína, ginseng y por supuesto el alcohol, pues además de causar una posible adicción, reducen la disponibilidad de vitaminas y minerales en nuestro cuerpo.
Llena tu dieta de colores
Recuerda que una dieta saludable debe de contener porciones de todos los grupos de alimentos ¿un tip? Incluye más alimentos vegetales que otros.
Mientras más colirida sea tu dieta más beneficios te dará, además de que la variedad de sabores te motivará a seguir. Ojo los colores deben ser naturales en los alimentos.
1. Carbohidratos complejos
Comer carbohidratos complejos e integrales puede aumentar los niveles de serotonina. La clave es consumir carbohidratos mínimamente procesados y que no desencadenen subidas ni bajadas de azúcar en sangre.
Algunas opciones son el arroz integral, el arroz salvaje, la quinoa, el mijo, la avena o el amaranto.
2. Alimentos ricos en selenio
Un déficit de selenio puede desencadenar depresión, irritabilidad y problemas de tiroides. No se necesitan grandes cantidades de este mineral y sus requerimientos son fácilmente alcanzables consumiendo alimentos ricos en selenio como las setas, nueces de Brasil, marisco, atún, cereales, semillas y otros frutos secos.
3. Alimentos ricos en folatos
Un déficit de folatos se relaciona con depresión ya que puede reducir los niveles de serotonina en el cerebro. Tomar alimentos ricos en vitamina B9, puede recuperar los niveles y subir el estado de ánimo.
Algunos alimentos ricos en ácido fólico son los vegetales de hoja verde, sobre todo verde oscuro como la col kale, las acelgas y espinacas, y legumbres como los guisantes, lentejas y judías.
4. Alimentos ricos en ácidos grasos Omega-3
Un estudio realizado por la Universidad de Pittsburg mostró que la gente con niveles de ácidos grasos poliinsaturados omega-3 bajos tenían un riesgo más elevado de sufrir una ligera depresión y humor pésimo. Así que tomar superalimentos ricos en Omega-3 como las semillas de lino, las semillas de chia, el cáñamo, las nueces y las algas pueden mejorar nuestro estado de humor.
5. Alimentos ricos en vitamina D
La fuente principal de vitamina D es la exposición solar. En invierno, y sobre todo en los países nórdicos, gran parte de la población está en riesgo de sufrir deficiencias de esta vitamina, hecho que está relacionado con problemas de depresión y altos indicios de suicidio.
Es por eso que muchos expertos de la nutrición recomendamos tomar suplementación de vitamina D y tomar alimentos ricos en ella sobre todo durante los meses de invierno.
Los alimentos veganos que proporcionan vitamina D son las setas.
6. Grasas vegetales
El cerebro necesita grasa para funcionar correctamente. Desafortunadamente parece que la sociedad tenga cierto rencor o miedo al consumo de grasas lo que puede comportar un déficit de macronutrientes necesarios para el buen funcionamiento del sistema nervioso central. Además las grasas poliinsaturadas que encontramos en el reino vegetal son factores responsables de lucir una piel bonita, limpia y más joven.
Incorpora en tu alimentación alimentos ricos en grasas vegetales como aceitunas, aguacate, frutos secos, semillas, y aceites vegetales como el de coco y oliva con moderación.
7. Alimentos picantes
Alimentos picantones y con efecto termogénico pueden incrementar la circulación provocando que el cerebro libere más endorfinas que nos subirán el estado de ánimo. Prueba de incorporar chiles en tus platos y especias como el jengibre en tus preparaciones culinarias.
8. Alimentos ricos en magnesio
Muchas personas tienen una deficiencia de magnesio debido a la pobreza en nutrientes cada vez más exagerada de nuestras dietas. Este mineral tan esencial tiene propiedades relajantes musculares, puede reducir el estrés y mejorar el humor.
Para consumir más magnesio, trata de aumentar el consumo de vegetales, legumbres, frutos secos y superalimentos como el cacao crudo.
9. Alimentos ricos en hierro
La anemia o falta de hierro en sangre puede comportar fatiga o cansancio crónico, irritabilidad y depresión. Mantener una alimentación con unos niveles adecuados de hierro será fundamental para mantener una buena salud emocional.
Alimentos ricos en hierro son las algas, las legumbres, los vegetales de hoja verde, las pipas de calabaza y superalimentos como el cacao crudo.
El chocolate es un arma de dos filos, el chocolate oscuro es un paliativo de la tristeza, pero los otros tipos de chocolate, si bien ayudan momentáneamente, generan picos en la glucosa y fomentan la ganancia de peso, que contribuye a que la persona se sienta mal consigo misma.
No se debe olviar, ni dejar del lado la actividad física, la cual es importantísima en el combate de la depresión.
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