Ubicaron la variante B.1.641 entre un grupo de 200 venados y encontraron una secuencia derivada de humanos con estrecha relación
Investigadores de Estados Unidos y Canadá descubrieron una nueva variante del covid-19 en ciervos, de la que ya se registra un contagio en humanos. Se trata de la variante B.1.641, una de las más divergentes identificadas hasta el momento.
El estudio al respecto fue realizado por el Centro Nacional de Enfermedades de Animales Extranjeros, de la Agencia Canadiense de Inspección de Alimentos, y la sección de Investigación y Monitoreo de Vida Silvestre, del Ministerio de Recursos Naturales y Silvicultura de Ontario, entre otras instancias. Los resultados fueron publicados en la revista Nature Microbiology.
Los especialistas realizaron una vigilancia observacional en 300 ciervos de Ontario, Canadá, durante noviembre y diciembre de 2021, donde se encontró una variación con 76 mutaciones.
De acuerdo con los expertos, se identificó “un linaje muy divergente de SARS-CoV-2 en el venado cola blanca (B.1.641). Es uno de los linajes de SARS-CoV-2 más divergentes identificados hasta el momento, con 76 mutaciones (incluidas 37 asociadas previamente con huéspedes mamíferos no humanos)”.
Se aplicó una serie de análisis que proporcionó evidencia de evolución y transmisión en ciervos, así como una ascendencia compartida con virus derivados de visones (un tipo de mamífero carnívoro).
“Nuestro análisis también reveló una infección humana vinculada epidemiológicamente”, detallaron
Sin embargo, los especialistas indicaron que “no está claro si la infección ocurrió directamente ciervo-humano o si estuvo involucrado un huésped intermedio, como el visón u otra especie aún no definida”.
Contagio cruzado
Hasta septiembre de 2022, los informes de observación y experimentación en animales de granja, domésticos, cautivos y de vida libre han demostrado que el SARS-CoV-2 puede infectar al menos a 54 especies de mamíferos no humanos.
El venado de cola blanca (Odocoileus virginianus) es susceptible al SARS-CoV-2. Según los estudios revisados por los especialistas, se ha informado la transmisión del virus entre ciervos y múltiples contagios de humanos a ciervos, mientras que la mayoría del SARS-CoV-2 aislado y reportado en ciervos ha sido similar a los linajes que circulan entre humanos en la misma región.
“La persistencia del SARS-CoV-2 en animales salvajes posiblemente podría resultar en la evolución viral a través de la adaptación al huésped animal.
Aunque los aislados de virus que circulan en los animales pueden volverse menos aptos para los humanos, sigue existiendo el riesgo de una aparición futura en la población humana, con consecuencias desconocidas”.
Así, los científicos encontraron 21 casos de SARS-CoV-2 entre los 300 ciervos analizados. “El linaje de los ciervos de Ontario forma una rama muy larga con 76 mutaciones de nucleótidos conservadas en relación con el SARS-CoV-2 ancestral (Wuhan Hu-1)”.
En el análisis también se identificó una secuencia derivada de humanos de Ontario estrechamente relacionada con la encontrada en ciervos, pues tenía el 80/90 de mutaciones compartidas.
“Hay muchas interfaces entre humanos y ciervos, incluidas las interacciones públicas con ciervos salvajes y ciervos cautivos para la cría, la exhibición o la caza. Para muchas comunidades, los ciervos son importantes tanto desde el punto de vista de la seguridad alimentaria como cultural”, explicó Samira Mubareka, coautora del estudio
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CAB