Haciendo una reflexión sobre las ciudades que han vivido el problema del narcotráfico, llegó a la conclusión de que no hay ningún rincón de la República que no haya tenido influjo del narco. Entre otros, mencionó a Cancún, Córdoba, Jalapa, los estado de Guerrero, Veracruz, Culiacán, Sinaloa, Tamaulipas, Baja California, San Luis Potosí, Durango, Guanajuato, Oaxaca, Puebla, que aunque está más afectado por los huachicoleros, sigue siendo crimen organizado; Monterrey, Morelos, Estado de México y la Ciudad de México.
En este sentido, Zea destacó las escenas que se vivieron ayer en el sepelio de “El Ojos” en Tláhuac, mismas que aseguró lo sorprendieron y entristecieron porque hoy en día se vuelve viral en las redes sociales “las cosas más idiotas del mundo”, lo cargado de mentiras, morbo y sexualidad, tal como pasó con el reciente caso del socavón, la audiencia de Javier Duarte o el accidente de Reforma en el que se vio involucrado un auto BMW, ante esto, consideró que el sentido común “se fue de vacaciones o ha pedido licencia”, lo que quedó de manifiesto ayer en el sepelio porque a pesar de que la sociedad está indignada por la presencia del narco, un grupo de 400 habitantes de Tláhuac, asistieron a despedir a un narcomenudista.
“Hemos perdido el sentido común”, aseguró el periodista porque -dijo- no hay narcotraficante ni miembro del crimen organizado que pueda operar sin la complicidad de las autoridades, pero también de la sociedad quien no denuncia y acepta regalos de su parte. “¿Dónde quedó el pobre pero honrado?”, cuestionó.
Finalmente subrayó: “En la medida en que seamos copartícipes, cállese, no reclame absolutamente nada”.
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