
El Papa Francisco, de 88 años, sorprendió a los fieles al aparecer en la Plaza de San Pedro del Vaticano el 6 de abril de 2025, tras recuperarse de una neumonía bilateral que lo mantuvo hospitalizado durante 38 días en el Hospital Gemelli de Roma.
Durante la misa del Jubileo de los Enfermos y Agentes Sanitarios, el Pontífice se dirigió brevemente a los presentes, agradeciendo las oraciones recibidas durante su enfermedad y enfatizando la importancia de no excluir a los enfermos de la sociedad. Destacó que afrontar el sufrimiento de forma conjunta “nos hace más humanos”.
A pesar de las secuelas de la enfermedad, como dificultades respiratorias y pérdida de voz, el Papa mostró signos de mejoría. Se desplazó en silla de ruedas y utilizó cánulas nasales para facilitar su respiración. Su aparición fue recibida con emoción por los fieles congregados en la plaza.
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La Santa Sede aún no ha confirmado su participación en los ritos de Semana Santa, aunque se espera que las principales ceremonias sean presididas por cardenales debido a su estado de salud. Los médicos confían en su recuperación, aunque advierten que su vida estuvo en riesgo en dos ocasiones durante la enfermedad.
Esta reaparición coincide con el Año Santo que celebra la Iglesia Católica, y el Papa Francisco continúa mostrando una actitud positiva y agradecida por el cariño recibido durante su convalecencia.