El autor de Caballo de Troya, J.J. Benítez, anuncia su nuevo libro “Belén”: será el duodécimo y último tomo de la serie que aborda la vida de Jesús de Nazaret
El escritor español aseguró que después de investigar durante 40 años la vida de Jesucristo, en esta nueva entrega se muestra un Jesús más humano.
Jesús de Nazaret, para mí, es un hombre-Dios. Es decir, nace en Belén con naturaleza humana; pero, cuando cumple 31 años, recupera la naturaleza divina y empieza a hacer prodigios y milagros. Es hombre y Dios al mismo tiempo. Antes, creo que ni él sabía quién era”, afirma tajante el escritor español J. J. Benítez.
Después de 40 años de investigar la vida de Jesucristo, “uno de los personajes fundamentales de la Historia”, y publicar una saga dedicada a sus últimos cuatro años, Caballo de Troya (Planeta), el narrador navarro concluye que “no sabemos nada de cómo ocurrió todo y los Evangelios canónicos son un naufragio”.
La famosa serie, cuyo primer tomo se publicó en 1984, llega a su fin con el volumen número 12, Belén, con millones de ejemplares vendidos y un total de 7 mil páginas que han sorprendido a los lectores con sus descubrimientos.
Nos han presentado a un Jesús más humano, más cercano, más familiar, más hombre, más bello, más lógico, más poderoso. No como
nos lo había pintado la tradición religiosa.
Un Jesús que necesitamos ahora más que nunca, porque la religión lo muestra muy lejano, castigador, fiscal, oscuro, incomprensible, violento. Y no fue así”, agrega.
El autor de 66 libros, que considera esta saga su “trabajo más profundo y emblemático”, confiesa que se siente “aliviado” de que haya concluido la “transcripción” de esta historia que le entregaron dos pilotos de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos.
Yo no introduje nada, ni ficción ni contexto histórico, sólo comprobé la veracidad de los datos que mencionaban. Dijeron que, en un proyecto secreto, consiguieron viajar en el tiempo al año 30 de nuestra era, a la antigua provincia romana de Judea (actual Israel), para seguir los pasos de Jesús y ver cómo fueron sus últimos años de vida pública”.
Entre las historias más sorprendentes, el autor de 76 años destaca tres. “La religión no te cuenta el conflicto que tuvo Jesús de Nazaret con su madre y su familia como consecuencia de la idea que tenía María sobre el Mesías.
Jesús trataba de explicarle que él no era el Mesías, porque un Mesías se consideraba un personaje militar, castigador, libertador del pueblo. Y le dice que no es su papel. Ahí empieza un alejamiento familiar que dura hasta el final”, señala.
Benítez también narra la relación del Hijo de Dios con su padre. “Lo que sé, por los Caballos de Troya, es que José era más escéptico que María, tenía sus dudas sobre el carácter milagroso de su hijo. Pero era un personaje muy equilibrado. Cuando muere en un accidente de trabajo, Jesús se queda al frente de la familia a sus 14 años. Tenía siete hermanos más. La virginidad de María es otro invento humano que no es necesario”.
Y, sobre María Magdalena, sostiene que ésta “nunca tuvo ninguna relación de pareja o sentimental con Jesús. Sólo se unió al grupo de mujeres que lo acompañaron durante su vida pública”.
Ratifica que Belén es el final de la saga, pero no debería haber sido el último tomo. “Es un material que debió aparecer en el volumen 9, que tiene más de mil páginas. Decidimos sacar material con la condición de que algún día se publicara. Si lees el 9 sin el 12, no afecta; si lees el 12 y el 9, lo entiendes mejor.
Hay otra información, anterior a la vida de predicación de Jesús, que son unos viajes que realiza fuera de Israel, pero no pertenece a la saga. Él viajó durante dos años y medio por el Mediterráneo, el Oriente próximo, pero anterior a su vida pública. Tal vez se publique algo después, pero de manera independiente, como una historia en sí misma”, dice.
Especifica que Jesús de Nazaret no muere a los 33 años. “Murió el 7 de abril del año 30. Y nació en el año menos 7 de nuestra era y tenía 36 años al momento de su fallecimiento. Nació el 21 de agosto, no en diciembre. La Iglesia trató de ocultar una fiesta pagana popular, por eso estableció el nacimiento el 25 de diciembre, pero es falso. Todo esto se descubre en Caballo de Troya, del que la gente me sigue escribiendo después de 40 años”.