El consumo de la cerveza sin alcohol es de los que más ha crecido durante la pandemia, con un alza de 62.6%, mientras que las ligeras se incrementaron 15.3%
Si bien la categoría no es nueva, la cerveza sin graduación alcohólica poco a poco ha ido ganando espacio en los anaqueles y refrigeradores de las tiendas y los restaurantes.
Tomó fuerza con la entrada al segmento de los dos grandes grupos cerveceros y logró tener un impulso con los hábitos de consumo que se generaron con la pandemia, orientados a cuidar más la salud.
El segmento duplicó su valor en los últimos cinco años en México y pasó de 24.8 millones de dólares en 2015 a 50.5 millones de dólares en 2020, con un crecimiento de 103.7%, de acuerdo con datos de Euromonitor International. Este aumento supera el de las cervezas lager que fue de 33.1% y el de toda la categoría, que se ubicó en 33.2%.
El consumo de la cerveza sin alcohol es también el que más ha crecido, con un alza de 62.6%, mientras que las ligeras se incrementaron 15.3%. Toda la categoría de cervezas aumentó 15.4%, de 2015 a 2020.
Cabe destacar que las grandes cerveceras, como Heineken y Grupo Modelo, fortalecieron su presencia en esta categoría antes de la emergencia sanitaria.
Por ejemplo, Corona Cero llegó a los refrigeradores en 2016, mientras que Heineken 0.0 lo hizo en octubre de 2019. Aunque los mexicanos ya conocían el segmento, en el que también compite Sol Cero, el reto fue demostrar que su sabor era igual al de una cerveza normal.
Carolina Cruz, analista de marketing independiente, comenta que el posicionamiento de las cervezas sin graduación alcohólica en el último año responde a estos movimientos de las grandes cerveceras, que innovaron en la categoría, a lo que se sumó la tendencia por las bebidas con menos calorías, menos carbohidratos o libres de gluten, que permite a las marcas llegar a nuevas tendencias de consumo y alimentación, así como a las personas que son celíacas.
Durante la pandemia, ya con las cervezas sin alcohol en canales de ventas como tiendas o supermercados, las cerveceras tuvieron una oportunidad para consolidar sus marcas en la categoría y generar ocasiones de consumo más íntimas y en casa, y con esto, desmarcar la cerveza como una bebida de fiesta u otros eventos sociales.
La analista detalla que, durante el año pasado, la venta de cerveza sin alcohol tuvo un crecimiento de 58%.“Las primeras marcas de cerveza sin alcohol tenían un sabor que no era tan agradable al paladar, sin embargo las empresas se han esforzado en mejorar este aspecto, por lo que el racional del consumidor se enfoca en estos productos que le dan ese plus de cuidar la salud, sin sacrificar sabor”, puntualiza.
En 2019, con el lanzamiento de Heineken 0.0, la cervecera anunció una inversión de 140 millones de pesos para iniciar con su producción en la planta de Meoqui, en Chihuahua. Rosamaría Treviño, gerente de marca de Heineken en México, cuenta que con la pandemia se abrió una oportunidad para la cerveza sin alcohol, que fue una opción ante las restricciones de ventas por las llamadas leyes secas en algunos estados del país.
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Para Karla Siqueiros, directora general de Cerveceros de México, esta tendencia está en línea con lo que ocurre en el mundo, ante la demanda de este tipo de productos, aunque la cámara no cuenta con datos sobre la producción de estas bebidas.
Es de destacar que la emergencia sanitaria provocó un incremento de 41 por ciento en el consumo de cerveza, pues los mexicanos pasaron de tomar el equivalente a 130.7 latas per cápita durante los primeros cinco meses del año pasado a 183.9 latas en el mismo periodo de este año, es decir 53 latas adicionales en sólo un año
En comparación con el mismo periodo del 2019, previo a la pandemia, el alza fue de 7 por ciento, de acuerdo con datos del INEGI y un ejercicio elaborado por El Financiero.
Este viernes 6 de agosto se celebra el Día Internacional de la Cerveza, con buenas noticias para el sector, debido a que se calcula que en los primeros cinco meses de este año, los mexicanos se bebieron alrededor de 5 mil 462 millones de litros de cerveza, un equivalente 30.6 six de cervezas o 183.9 latas.
“Vemos que los hogares ahora se siguen consintiendo, en 2019 el 67 por ciento de las casas compraron cerveza, el año pasado fue el 69 y para junio de este 2021 fue el 70 por ciento, de poquito un poquito se ha ido sumando”, dijo Marianna Vargas, gerente de comunicación y marketing de la división Worldpanel en Kantar México.
En el 2020, con la pandemia del coronavirus los hábitos en el consumo de cerveza se modificaron, hubo escasez porque por un par de meses se prohibió su producción, no se podían tener reuniones, no había bares, conciertos, ni estadios, por lo que la mayoría de las ocasiones de consumo migraron al hogar, lo que impulsó el consumo de la categoría light, ultra, artesanales y las cero alcohol.
“El consumo social se vio afectado fuertemente con el cierre de bares, pero también de eventos deportivos, conciertos y en general, reuniones masivas en todo el mundo. Si bien se descubrieron nuevos momentos de consumo en casa, abriendo una cerveza en días y horarios atípicos, el desequilibrio fue inminente”, refirió Agustín Cárdenas, gerente de data de la consultora McCANN Worldgroup
Justamente, debido a lo anterior, Grupo Modelo y Heineken apostaron por generar nuevas ocasiones de consumo, al integrar a su portafolio ofertas de cervezas con cero o bajo contenido de alcohol y menos calorías como Pacífico Suave, Victoria 1.8, Corona Ligera, Heineken 0.0, y Amstel Ultra Seltzer.
Asimismo, las cervezas artesanales aprovecharon la escasez del portafolio de Modelo y Heineken del año pasado y cautivaron a nuevos consumidores, el resultado es que este 2021 podrían cerrar con 1 por ciento del consumo nacional de cerveza.
“Con suerte y ayuda de nuestros consumidores, este año vamos a llegar a tener el 1 por ciento de la venta de cerveza en México. Hasta el año pasado el 99.16 por ciento de la venta hasta era de las grandotas, y será un hito increíble que la mexicana tenga el 1 por ciento”, celebró Alejo Magallanes, presidente de la Asociación Cervecera Mexicana (Acermex).
Agregó que el año pasado cerraron sus puertas cerca de 15 productores artesanales de cerveza, sobre todo las marcas que dependían del consumo en restaurantes, bares y cervecerías especializadas.
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