Con el pretexto de ofrecerles un trabajo, los dos acusados reclutaban a indígenas tarahumaras para obligarlos a trabajar como esclavos en la sierra de Chihuahua
Los dos sujetos detenidos en Chihuahua aparentaban contratar a los tarahumaras para trabajar en ranchos de la región, pero los mantenían en condiciones de esclavitud.
La Fiscalía del Estado de Chihuahua no dio a conocer si hay alguna investigación, o bien, si existen acusaciones en contra de los dueños de los ranchos donde esclavizaban a los indígenas.
Tarahumaras eran obligados a trabajos forzados en la sierra de Chihuahua
El informe oficial indica que la Fiscalía Especializada en Investigación de Violaciones de Derechos Humanos, ejerció acción penal en contra de dos integrantes de un grupo que captaba personas para obligarlos a realizar trabajos forzados en municipios de la sierra.
Los esclavizadores fueron identificados como Henri Jovany V. B., alias “El Chiapas”, y Domingo V. B., alias “El Mingo”.
A ambos se les dictó vinculación a proceso por el delito de trata de personas con penalidad agravada en la modalidad de trabajo forzado, cometido en perjuicio de cuatro adultos y un adolescente de la etnia rarámuri.
Falsas promesas de trabajo; gancho para esclavizar a indígenas Tarahumaras en Chihuahua
Las pruebas presentadas demostraron que los hombres atraían a las víctimas por medio de falsas promesas de trabajo, ofreciendo un pago diario de entre 200 y 300 pesos por acudir a colocar postes en la localidad de Yoquivo, del municipio serrano de Ocampo.
Una vez que los atraían, los trasladaban del lugar conocido como Lago de Las Garzas, en la población de Guachochi, a los campamentos en donde les quitaban sus pertenencias y los obligaron a trabajar por más de 12 horas diarias, todos los días de la semana.
De acuerdo con los datos de la carpeta de investigación, el 13 de febrero de 2022, una de las víctimas logró huir e informar a la autoridad sobre la situación, y a partir de ese momento personal de la Fiscalía Especializada inició con las intervenciones ministeriales para esclarecer el caso.
Los ahora vinculados formaban parte de un grupo estructurado que ejercía tratos inhumanos con las víctimas, a quienes amenazaban de muerte y castigaban físicamente si en algún momento intentaban huir del lugar.