Tres sospechosos de estar relacionados con el atentado del pasado lunes en el Manchester Arena, fueron detenidos por la policía y agencias de inteligencia de Gran Bretaña, por lo que la seguridad de lugares de interés de Gran Bretaña fue reforzada en todo el país, incluyendo el Palacio de Buckingham y el parlamento británico de Westminster, los cuales estarán cerrados “hasta nuevo aviso”.
El nivel de amenaza terrorista en Reino Unido se ha elevado a crítico, lo que significa que podría haber más ataques.
El gobierno dijo que un millar de soldados fueron apostados en lugar de la policía en sitios de gran atracción en Londres y otras ciudades.
La ministra del Interior, Amber Rudd, ha sugerido esta mañana que el presunto atacante de Manchester, Salman Abedi, era parte de una red de terroristas. Un hermano de Abedi, de 23 años de edad, fue detenido el martes.
Scotland Yard confirmó esta mañana que el palacio de Buckingham, Downing Street, el Palacio de Westminster y embajadas todos serán protegidos por los militares, liberando a la policía para otras tareas. Los conciertos y los eventos deportivos tendrán una protección similar en las próximas semanas.
El objetivo es “hacer de nuestra ciudad un lugar lo más hostil posible para que los terroristas planifiquen y actúen”, dijo la jefa de la policía de Londres, Jane Connor.
La “realidad” de la situación es que la policía debe estar lista para responder con rapidez con agentes armados, que ya forman parte de las patrullas, añadió.