La mujer mencionó que su hija de 4 años ya está recibiendo atención psicológica después del incidente; el restaurante realizó una limpieza y volvió a abrir.
Un restaurante de Burger King cerca de Buffalo, Nueva York, cerró temporalmente el fin de semana pasado después de que una cliente encontrara sangre en la comida de su hija. Tiffany Floyd, residente de Nueva York, compartió su angustiosa experiencia en un video publicado en TikTok el 26 de julio.
Floyd explicó que había visitado el Burger King en Getzville, Nueva York, donde compró una comida infantil para su hija Matayla, de cuatro años, que incluía una hamburguesa y papas fritas.
Mientras se alejaban del restaurante, Matayla comenzó a comer su hamburguesa, pero pronto notó algo extraño. “Escuché a mi hija decir: ‘Mamá, no quiero ketchup’, así que tomé la bolsa pensando que habían equivocado nuestro pedido”, relató Floyd. Con una mano enguantada, mostró la hamburguesa a la cámara, revelando manchas de sangre en la bolsa, los juguetes, las papas fritas y la hamburguesa de su hija.
Alarmada, Floyd se detuvo y llamó al Burger King para preguntar qué había pasado con su pedido. El gerente le explicó que un trabajador se había lastimado el dedo justo antes de preparar y empaquetar su pedido, y le ofreció un reembolso si regresaba al restaurante.
Preocupada por la salud de su hija, Floyd decidió llamar al departamento de salud local y presentar un informe.
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El video de Floyd se volvió viral, y muchos usuarios simpatizaron con ella, ofreciendo consejos sobre qué hacer a continuación. “Fue simplemente emocionalmente perturbador, no podía creerlo”, comentó Floyd a Today de NBC.
Floyd narró que, tras ver la sangre por primera vez, le gritó a su hija que escupiera lo que tenía en la boca, lo cual Matayla hizo de inmediato. Aunque inicialmente no quiso sacar conclusiones precipitadas, decidió llamar al restaurante para obtener más información. “El gerente se mostró muy indiferente al respecto”, recordó Floyd. “Fue en ese momento cuando comencé a ponerme furiosa”. Representantes de Burger King contactaron a Floyd para abordar el incidente.
El representante de Burger King informó que el restaurante cerró temporalmente durante el fin de semana para capacitar nuevamente a todos los empleados y contratar a una empresa externa para realizar una limpieza profunda. Además, todos los empleados recibieron su salario completo por los turnos perdidos durante el cierre. El restaurante reabrió el lunes 29 de julio.
Debido al incidente, la hija de Floyd no ha comido adecuadamente. “Ayer fuimos al médico para ver a su pediatra, hoy tenemos que ir a ver a un psiquiatra”, explicó Floyd. “También tengo que ir al hospital infantil en Buffalo y a la unidad de control de enfermedades infecciosas para que le hagan un análisis de sangre a mi hija.”