El fabricante de automóviles alemán Daimler inició la construcción de una fábrica de baterías de iones de litio para vehículos híbridos y eléctricos en Kamenz, al este de Alemania, para la que ha previsto una inversión de 500 millones de euros.
Al acto de arranque de las obras acudió, además del presidente de la junta directiva de Daimler, Dieter Zetsche, la canciller alemana, Angela Merkel, en una muestra de la importancia que la potente industria nacional del motor y el Gobierno del país dan a la revolución eléctrica en la automoción.
“La industria automovilística está afrontando una transformación fundamental y nosotros nos vemos a nosotros mismos como la fuerza impulsora tras este cambio”, aseguró Zetsche.
Esta segunda planta de baterías de Daimler en Kamenz, que entrará en funcionamiento a mediados de 2018, va a ser una de las más modernas y mayores factorías de su tipo a nivel mundial, asegura la empresa en un comunicado.
La nueva planta -dedicada a baterías para vehículos comerciales- extenderá las instalaciones de Daimler en Kamenz hasta los 80,000 metros cuadrados, hará que se doble el personal empleado hasta los 1,000 trabajadores cuando esté a pleno rendimiento y aspira a triplicar la producción actual.
Zetsche habló de una “ofensiva eléctrica” en Daimler y de los planes de Mercedes-Benz para ampliar su oferta de vehículos eléctricos e híbridos.
La nueva planta pertenece a Deutsche Accumotive, la filial que Daimler creó en 2009 para el desarrollo y la venta de baterías para vehículos eléctricos e híbridos.
Efe