Las medidas sanitarias que un médico recomendó hace 440 años para frenar la Peste Negra, podrían servir para acabar con el Covid-19.
La pandemia por Covid-19 se ha convertido en uno de los azotes más terribles que ha vivido la humanidad en los últimos 100 años, una enfermedad que ha tomado por sorpresa a los millones de habitantes de los cinco continentes y que ha cobrado la vida, hasta el momento, de dos millones de personas.
A diferencia de pandemias anteriores, en esta ocasión el coronavirus ha podido ser atajada y contratacada con vacunas desarrolladas en tiempo récord, así como con desarrollos científicos y tecnológicos que también le ha salvado la vida a millones de personas.
Sin embargo, echando una mirada a la historia existen algunas similitudes en la atención de la pandemias anteriores que podrían servir para terminar lo antes posible con este terrible mal.
Tal es el caso de la Peste Negra, una enfermedades más catastróficas y caóticas que acabó con aproximadamente 70 millones de personas que vivían en regiones de Europa y Asia.
De acuerdo con historiadores, la Peste Negra surgió por la bacteria Yersinia pestis en rurales y semirrurales de Asia, África y Estados Unidos; sin embargo, esta bacteria llegó hasta los humanos y fue como comenzó el contagio masivo.
Los síntomas de la enfermedad eran severos y no había tanta tecnología para tratar a los pacientes, por lo que el número de fallecimientos ha sido el más elevado que se ha registrado a lo largo de la historia. Entre los malestares se encontraba inflamación y sensibilidad en la palpación de ganglios linfáticos de la ingle, cuello y axila, además de afectación severa en los pulmones.
Esta enfermedad ha sido un tanto comparada con la pandemia de COVID-19 que actualmente está afectando al mundo; incluso, las medidas sanitarias que desde el año pasado se han tomado son similares a las que un médico recomendó hace 440 años para frenar la Peste Negra.
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De acuerdo con una investigación de la BBC, en la isla de Cerdeña, entre 1581 y 1582, se desató la peste negra luego de que un marinero procedente de Marsella inició el brote de esta.
El médico Quinto Tiberio Angelerio, al ver la gravedad del contagio, se dedicó a formular un manual con el cual especificaba algunas medidas que ayudan a cuidar la salud de las personas.
Este fue nombrado como Ectypa Pestilentis Status Algheriae Sardiniae y se detallaban 57 puntos para detener la expansión de la peste negra. Entre las recomendaciones se encuentran algunas que hoy en día se ocupan:
- No abandonar el hogar: El médico señaló que era importante mantenerse en casa y evitar salir o realizar reuniones; recomendaba que sólo una persona saliera en caso de ser necesario.
- Mantener distancia con los demás: Las personas tenían que salir a la calle con un bastón con el que medían la distancia de separación de dos metros.
- Atención de hospitales: Las personas de bajos recursos eran atendidos de forma gratuita y aseguró que las personas contagiadas no podían moverse por su cuenta, sino que tenían que ser trasladados a los hospitales por personal especializado para que recibieran atención médica.
Ante esto, Ole Benedictow, profesor de Historia en la Universidad de Oslo, señaló que el médico encargado de realizar este manual tuvo una visión avanzada para el nivel de conocimiento que se tenía en ese momento.
“Es sorprendente encontrar este médico con este nivel de conocimiento en esta ciudad más bien pequeña. Sería más lógico que esto se viera en las ciudades comerciales más grandes, como Pisa o Florencia. Pero este médico estaba adelantado a los tiempos. Es algo realmente impresionante
Bajo estas medidas, entre las que destacaba la sana distancia, fue como se logró frenar la Peste Negra, la cual también estamos utilizando desde hace un año por la pandemia de COVID-19.
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NCV