En lo que va de este año, 299 mujeres (más de una por día) han sido asesinadas en Turquía, un país de 85 millones de habitantes
Este sábado, cientos de manifestantes denunciaron los asesinatos de mujeres en Turquía; es el octavo día de una rebelión desencadenada por un doble feminicidio en Estambul, que se extendió a todo el país.
En lo que va del año, 299 mujeres (más de una por día) fueron asesinadas en Turquía, un país de 85 millones de habitantes, según un recuento de una asociación feminista turca.
En Estambul, la mayor ciudad del país, centenares de personas participaron el sábado en la marcha, informó un periodista de la AFP.
“¡Erdogan asesino! ¡AKP asesino!”, gritaron algunos manifestantes, apuntando al presidente islamoconservador Recep Tayyip Erdogan y a su Partido Justicia y Desarrollo (AKP), en el poder desde 2002.
“¡Este gobierno deja matar a chicas jóvenes!”, proclamó uno de los líderes de la manifestación, Günes Fadime Aksahin, vestido de negro como muchos de los participantes, frente a los carteles y retratos de dos muchachas de 19 años asesinadas el 4 de octubre por el mismo hombre en Estambul, con treinta minutos de intervalo.
“¡Quiero que dejen de masacrar a nuestras hijas!”, afirmó Gülizar Sezer, madre de una joven encontrada muerta en junio en Estambul tras haber sido arrojada al mar envuelta en una alfombra.
Grupos de mujeres también se manifestaron el sábado en Ankara, la capital turca, y en Esmirna, tercera ciudad del país, según imágenes difundidas por una federación feminista.
Los manifestantes también exigen la reintegración de Turquía a la convención del Consejo de Europa para combatir la violencia contra las mujeres, conocida como Convención de Estambul, denunciada en 2021 por el gobierno.
Las protestas son cotidianas desde hace una semana en todo el país, especialmente en los campus universitarios.
El movimiento llegó a ciudades conservadoras, como Sanliurfa, en el sudeste.
Erdogan atribuyó inicialmente los asesinatos al alcohol y a la influencia de las redes sociales, pero el miércoles prometió endurecer la legislación para frenar la violencia contra las mujeres.