“Cena” era un perro raza labrador color negro con 10 años de edad que ofreció sus servicios en la Marina por su olfato perfectamente entrenado. Dedicó su vida a rastrear bombas y objetos explosivos durante la guerra de Afganistán.
Ayer, 26 de julio, cientos de personas se reunieron en Michigan para despedirlo después de que veterinarios le diagnosticaran cáncer.
El labrador negro de 10 años, recibió la despedida con honores antes de recibir la eutanasia en el USS LST 393, un buque museo en Muskegon, y llevado en un ataúd cubierto por la bandera de Estados Unidos.
“Cena” se jubiló en 2014 y recientemente fue diagnosticado con cáncer terminal de huesos.
Su despedida fue organizada por su propietario, el cabo Jeff DeYoung, que fue emparejado con el perro en 2009 y 2010 durante un viaje de combate en Afganistán, y terminó por adoptarlo en 2014. A partir de entonces, Cena ayudó a DeYoung con su trastorno de estrés postraumático.
Más de 100 personas, 30 autos Jeeps, 30 motocicletas y unas 35 banderas de los Estados Unidos acompañaron durante un recorrido de honor al veterano de cuatro patas. Cena y DeYoung se presentaron con su uniforme de gala.
Durante las frías noches en el desierto, el labrador ayudó al humano en medio de la guerra, lo alertó del avance de los talibanes, y lo consoló cuando vio morir a siete de sus amigos durante los enfrentamientos.
“Señor, nuestros corazones con gran dolor te estamos enviando a otro infante de la marina hacia ti hoy”, dijo el Capitán Wesley Spyke, director de Asuntos de Veteranos del Condado de Muskegon, mientras solicitó una oración.
Cena fue “dormido” a bordo del buque alrededor de las 18 horas.