Una parte de la Delegación Mexicana realizará un campamento en Hiroshima y sus vuelos ya están programados
Carlos Padilla, presidente del Comité Olímpico Mexicano (COM), rechazó que atletas mexicanos vayan a utilizar el avión presidencial para ir a las Olimpiadas de Tokyo 2020.
En entrevistas con medios, Padilla dijo que agradecía el ofrecimiento del Gobierno mexicano, pero señaló que era complicado aceptar por la logística y las medidas sanitarias por el COVID-19.
“Agradecemos mucho el ofrecimiento que hizo este día el Secretario de Hacienda para usar el avión presidencial, pero nosotros ya tenemos confirmados boletos de avión con una aerolínea japonesa y además la logística para un vuelo de esta naturaleza es muy complicada por toda esta situación de la COVID-19 y las medidas sanitarias que está implementando Japón”, dijo Padilla
“Es una buena intención en respaldo, pero será muy complicado viajar en él, porque no puede hacer los suficientes vuelos para llevar a los atletas, que tienen que estar cinco días antes y regresar al día siguiente de su participación. Es muy difícil”, comentó
De acuerdo con Padilla, una parte de la Delegación Mexicana realizará un campamento en Hiroshima y sus vuelos ya están programados, otros viajarán en pequeños grupos antes y durante estén activos los Juegos Olímpicos, por lo que no es económico que un avión de ese tamaño esté en constante movimiento entre finales de julio y principios agosto.
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“La logística que presenta Japón para estos Juegos es difícil, porque los atletas, en cuanto terminen su participación, deben regresar al día siguiente y eso se logra con una aerolínea contratada”, explicó Padilla.
La negativa se dio luego de que el Secretario mexicano de Hacienda, Arturo Herrera dijera a periodistas este lunes:
“A finales de mes se tiene hasta ahora programado trasladar a los atletas a los Juegos Olímpicos de Tokio”
El Secretario confirmó en Palacio Nacional que el avión salió ya del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México con destino a California (Estados Unidos) para su mantenimiento rutinario, que fue “adelantado para que esté en las mejores condiciones posibles” para el traslado de los deportistas.
Cabe recordar que cuando el presidente López Obrador llegó al poder en diciembre de 2018, puso en venta el avión presidencial usado por su antecesor porque lo consideraba demasiado lujoso, sin embargo la aeronave se ha convertido en un quebradero de cabeza para el actual Gobierno.
En ese entonces, el Presidente mandó el avión a un hangar de Boeing en Estados Unidos pero tras más de un año sin encontrar comprador regresó a México, donde López Obrador anunció un sorteo para deshacerse del aparato, que derivó finalmente en septiembre del año pasado en una rifa simbólica en la que solo se sorteó el valor de la aeronave.
El Secretario de Hacienda explicó este lunes que “se acaba de iniciar un nuevo proceso de compra” y que el mantenimiento que se realizará en Estados Unidos servirá para “determinar el estado actual y los precios base” para la negociación.
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CAB