China y California firmaron un acuerdo este martes para colaborar en la reducción de emisiones, días después que el presidente Donald Trump decidiera retirar a Estados Unidos del Acuerdo de París.
Advirtiendo Jerry Brown, gobernador californiano, que si no se toman medidas urgentes, el “desastre sigue siendo inminente”.
Por ahora, dijo, China, los países europeos y algunos estados de Estados Unidos llenarán el vacío abierto por la decisión del gobierno federal de abdicar de su papel de líder en la materia.
“Nadie puede quedarse al margen. No podemos darnos el lujo de que alguien se quede afuera del tremendo esfuerzo humano de hacer la transición a un futuro sustentable”, señaló Brown. “El desastre sigue siendo inminente y tenemos que dar la vuelta”.
Brown mantuvo una reunión a puertas cerradas con el presidente chino Xi Jinping, durante la cual ambos se comprometieron a ampliar el comercio entre California y China poniendo el acento en las llamadas tecnologías verdes que ayuden a enfrentar el cambio climático.
Así, mientras la decisión de Trump de abandonar el acuerdo de París, argumentando que favorece las economías emergentes como China y la India a expensas de los trabajadores estadounidenses, ha recibido fuertes críticas en Estados Unidos y el mundo, China se apresuró a ratificar nuevamente el acuerdo forjado con el gobierno del anterior presidente Barack Obama.
El acuerdo entre California y el Ministerio de Ciencia y Tecnología chino esquivó la decisión de Trump, al vincular la segunda economía mundial (China) con la octava (California) en un asunto de importancia global creciente.
Brown firmó acuerdos similares con las provincias chinas de Jiangsu y Sichuan.
Los acuerdos, que no son vinculantes, incluyen inversiones en fuentes de energía bajas en carbón, cooperación en investigaciones climáticas y comercialización de tecnologías limpias. No establecen nuevas metas de reducción de emisiones.