
Por: Hanna García Arredondo
Una investigación periodística realizada durante las últimas semanas revela un patrón sistemático de presuntas irregularidades, nepotismo, encubrimiento y abuso de poder en el Colegio de Bachilleres Plantel 2 “Cien Metros”, ubicado en la Ciudad de México, bajo la administración de la directora Sandra Garduño Peralta.
La historia que destapó todo
El caso del profesor Omar Tomás González Martínez ha servido como detonante para exponer una serie de presuntas conductas irregulares. González Martínez fue separado de su cargo tras ser acusado de acoso sexual por una alumna identificada como R.L.G., quien, según testimonios recabados, habría intentado previamente sobornarlo para obtener una calificación aprobatoria en la materia de Contabilidad.
“La alumna R.L.G. se presentó fuera de tiempo a realizar un examen final y ante la posibilidad de reprobar la materia, intentó convencerme de asignarle un diez, ofreciendo sobornos que incluían materiales didácticos, ropa, comida y dinero”, declaró el profesor en documentos obtenidos por esta reportera.
Según fuentes cercanas al plantel que solicitaron el anonimato por temor a represalias, “la alumna habría llegado a un acuerdo con la directora Sandra Garduño para obtener su certificado y calificaciones aprobatorias sin asistir a clases, a cambio de presentar la acusación contra el docente”. Nuevas informaciones proporcionadas por personal del plantel “cansado de los abusos de Garduño” confirman este acuerdo, señalando específicamente que “la directora acordó con la alumna acusante que si ésta mantiene la acusación le será entregado su certificado sin problemas”.
Como prueba de este presunto arreglo, la alumna habría sido cambiada de grupo tras el incidente, con instrucciones específicas para que todos los profesores la aprobaran, obteniendo calificaciones satisfactorias en el primer parcial sin haberse presentado a clases.

Patrón de irregularidades y encubrimiento
La investigación ha revelado al menos 19 casos preocupantes que habrían ocurrido bajo la gestión de Garduño Peralta, entre los cuales destacan:
Seguridad comprometida
Uno de los incidentes más graves fue la muerte de una alumna ocasionada por un petardo a las afueras del plantel, hecho que no habría sido debidamente investigado según personal de la institución.
“Hubo una riña entre dos alumnos del turno vespertino donde uno de ellos portaba un arma de fuego. Afortunadamente, el arma se trabó antes de ser disparada, pero el incidente fue minimizado por la dirección”, afirmó un docente que solicitó mantener su identidad en reserva.
Además, se han reportado robos dentro del estacionamiento del plantel a plena luz del día, sin que se hayan implementado medidas de seguridad adicionales ni investigaciones efectivas.
Nepotismo y abuso de poder
Múltiples fuentes señalan que Garduño Peralta habría contratado a su hermana como responsable de laboratorios en el turno vespertino, a pesar de que no cumplía con los requisitos institucionales para el puesto.
“Cuando algunos compañeros solicitaron la renuncia de su hermana por incompetencia, una laboratorista que denunció mobbing fue acosada laboralmente por defender a la familiar de la directora”, señaló un trabajador administrativo.
Te puede interesar: Maestro rechaza soborno y lo acusan de acoso; alumnos lo defienden
Posteriormente, la hermana de la directora habría sido reubicada como secretaria del Coordinador de la Zona Norte, Felipe Huerta Orea, quien, según las fuentes consultadas, también estaría involucrado en el encubrimiento de estas irregularidades.
Beneficios económicos personales
Uno de los señalamientos más graves indica que Garduño Peralta sería la beneficiaria real de las ganancias de la cafetería del plantel, utilizando presuntamente a un prestanombres para firmar el contrato oficial.
“No se permite la salida de los alumnos para comprar en los puestos externos, obligándolos a consumir en la cafetería. Regularmente se ve a personal de la cafetería subiendo a entregar dinero directamente a la oficina de la directora”, afirmó un trabajador de servicios del plantel.
Adicionalmente, se señala que los alumnos de segundo semestre del turno matutino son obligados a llevar botellas PET como requisito para aprobar, pero no existe transparencia sobre el destino de los recursos obtenidos por la venta de estos materiales reciclables.
Represión a la disidencia
La investigación documentó un intento de protesta pacífica realizada por alumnos en apoyo al profesor Omar González durante la semana del 24 al 28 de marzo de 2025. Según múltiples testimonios, los estudiantes fueron reprimidos, acosados e intimidados por jefes de materia que actuaban bajo órdenes directas de la directora.
“Nos llevaron a la oficina de la directora donde nos amenazaron con darnos de baja si continuábamos apoyando al profesor”, declaró un estudiante que participó en la protesta.
La profesora Carolina Guzmán Mendoza también habría sido víctima de acoso laboral e intimidación por parte de la dirección, al ser señalada de incitar a los alumnos a favor del profesor González.
Se pudo comprobar mediante testimonio de una profesora que prefiere el anonimato por temor a represalias, que el día 24 de marzo en el turno vespertino la jefa de formación laboral Maria de Jesús Castulo Martinez realizo una junta extraordinaria con los demás profesores de academia para deslindarse de toda responsabilidad en el caso del profesor Omar González, sabiendo que ella fue quien no firmo el documento inicial presentado por el profesor y presto dicho escrito a la madre y alumna para basar su denuncia contra el profesor, agregando la acusación sin comprobarlo difamando al docente no estando presente.
Encubrimiento de casos de acoso
Contradiciendo su aparente celo contra el acoso en el caso del profesor González, la directora habría ocultado denuncias de alumnas menores de edad que reportaron acoso sexual por parte de un profesor identificado como Fortino.
“El profesor casi es linchado por padres de familia, pero la directora lo protegió negando las acusaciones”, señaló una fuente administrativa del plantel.
De manera similar, un prefecto identificado como David, quien labora actualmente en el edificio D del turno vespertino, habría sido transferido desde el Plantel 3 del Colegio de Bachilleres precisamente para protegerlo de demandas por acoso sexual presentadas en su anterior centro de trabajo.
Testimonios de alumnas mencionan que el profesor Jonathan Israel de la academia de formación laboral, actualmente dando introducción al trabajo, afirman ser acosadas sexualmete por dicho profesor, incluso tocando y abrazando sin su consentimiento diciendo palabras lascivas
Manipulación de procedimientos administrativos
Según documentación a la que tuvo acceso esta reportera, la dirección habría modificado actas administrativas e incluso ocultado denuncias de agresiones para proteger a trabajadores afines a la administración, como el caso de una empleada identificada como Edna Belén Flores Calderón.
Adicionalmente, se señala que la jefa de formación laboral, María de Jesús Cástulo Martínez, habría recibido horas adicionales provenientes de una profesora jubilada, Rocío Bustamante, presuntamente para “comprar su silencio” en el caso del profesor Omar González.
Represalias y despidos injustificados
El patrón de conducta incluye varios casos de despidos presuntamente injustificados, como el de Wendy Suárez Juárez, quien habría sido cesada a partir de una “denuncia inventada y asesorada” por la directora Garduño Peralta y el coordinador de la zona norte, Felipe Huerta Orea.
En el caso del profesor González, fuentes cercanas indicaron que, tras prohibirle el acceso al plantel, la directora y la jefa de formación laboral visitaron los grupos que tenía a su cargo, afirmando falsamente que “el docente se negó a entregar listas y trabajos afectando calificaciones parciales”, para desprestigiar su imagen frente a los estudiantes.
Designaciones cuestionables
La investigación también reveló que el actual subdirector, Francisco Iván Oliveros Serrano, habría sido designado por su amistad con la directora Garduño, sin contar con la antigüedad ni las horas basificadas necesarias para el cargo.
“Era taxista, luego de manera sorpresiva lo nombraron jefe de materia de Química y actualmente es subdirector, todo sin cumplir los requisitos institucionales”, afirmó un docente de tiempo completo.
Brigada de defensa digital
La investigación ha identificado a varios colaboradores cercanos a la directora que operan como una “brigada digital” para defender su gestión. Destaca el caso de Viry Dorantes, señalada por múltiples fuentes como “protegida de Garduño”, quien presuntamente se ha dedicado a “fungir como bot en todas las publicaciones que delatan a Garduño” en redes sociales y medios digitales; y al parecer también nos informan es tía de la alumna que acusa al profesor González, lo que nos permite entender sus acciones.

“Cada vez que aparece algún comentario crítico o información comprometedora sobre la directora en redes sociales, inmediatamente Dorantes y otros colaboradores cercanos intervienen para desacreditar las denuncias o atacar a quienes las hacen públicas”, señaló un profesor del plantel que prefirió mantener el anonimato.

Reacciones y consecuencias
Esta investigación periodística ha sido presentada a la Secretaría Anticorrupción y Buen Gobierno, así como a la Fiscalía Anticorrupción, quienes han confirmado la apertura de una investigación sobre los hechos denunciados.
El profesor Omar González, actualmente separado de su cargo, ha solicitado formalmente una revisión imparcial de su caso y la restitución de sus funciones docentes.
Por su parte, hasta el cierre de esta edición, ni la directora Sandra Garduño Peralta ni las autoridades del Colegio de Bachilleres han emitido declaraciones sobre las acusaciones presentadas en este reportaje.
Un sistema educativo cuestionado
Las irregularidades denunciadas en el Plantel 2 “Cien Metros” del Colegio de Bachilleres ponen de manifiesto las debilidades de los mecanismos de supervisión y rendición de cuentas en el sistema educativo público, donde directivos con poder discrecional pueden actuar con impunidad, afectando la calidad educativa y el desarrollo profesional de docentes y alumnos.
Esta investigación continuará dando seguimiento al desarrollo de las denuncias y los resultados de las investigaciones oficiales que se han iniciado a raíz de estos señalamientos.
Listado completo de irregularidades bajo investigación
Se sumarán a una denuncia de cierta partre del profesorado dirigido a la SEP, a La Secretaría Anticorrupción y Buen Gobierno y a la Fiscalía Anticorrupción los siguientes casos relacionados con la administración de la directora Sandra Garduño Peralta en el plantel 2 Cien Metros del Colegio de Bachilleres:
- Riña dentro del plantel 2 Cien Metros turno vespertino de dos alumnos con pistola, donde a un alumno se le trabó la pistola antes de disparar contra su compañero.
- Robo de auto dentro del estacionamiento del plantel 2 a plena luz del día.
- Denuncia de acoso (mobbing) por parte de una laboratorista contra los compañeros que pidieron la renuncia de su hermana cuando la contrató sin cumplir con requerimientos institucionales.
- Contratación de su hermana como responsable de laboratorios turno vespertino, constituyendo nepotismo y abuso de poder, y después su contratación actual como secretaria del Coordinador de la Zona Norte.
- Reporte de la cafetería del plantel 2 Cien Metros, donde se ha detectado que suben a entregarle el dinero a la directora del plantel; no permite la salida a los alumnos a comprar en los puestos de afuera obligando a comprar en la cafetería; se tiene conocimiento que ella es la titular y la persona que firma el contrato es su prestanombres.
- Acoso laboral e intimidación a la profesora Carolina Guzmán Mendoza, ya que la señala de incitar a los alumnos a favor de apoyar en el caso del profesor Omar González.
- Cese injustificado de Wendy Suárez Juárez por una denuncia inventada y asesorada por la directora Sandra Garduño Peralta y el Coordinador de Zona Norte Felipe Huerta Orea.
- Actas administrativas modificadas por parte de la dirección, ya que con denuncias de agresiones no levanta actas y las oculta para proteger a la trabajadora Edna Belén Flores Calderón.
- Comprobar el dinero de la venta de PET, ya que obligan a los alumnos para llevar PET para pasar grupos de segundo semestre turno matutino.
- Encubrimiento por parte del Coordinador de Zona Felipe Huerta Orea con trabajadores para no cumplir con sus labores, sobre todo de servicios.
- Ocultar denuncias de alumnas menores de edad que reportaron acoso sexual del profesor Fortino, quien casi fue linchado y ella lo protegió negando dichas acusaciones.
- Otorgar horas a la Jefa de Formación Laboral María de Jesús Castulo Martínez de la profesora recién jubilada Rocío Bustamante, para comprar su silencio en el caso del profesor Omar González.
- Hacer tratos con alumnas para acusar a profesores de acoso y cesarlos, ofreciéndoles su certificado y calificaciones sin presentarse a clases.
- En el caso del profesor Omar González se pudo saber que la alumna que lo acusó hizo un trato para ser beneficiada con su certificado y difamar al profesor; la misma alumna se lo habría confesado a uno de sus amigos y este a su vez, comentado a una profesora. Como prueba fue nuevamente cambiada de grupo donde se les dio indicación a los profesores de aprobarla, primer parcial aprobado en su totalidad sin haberse presentado.
- En la semana del 24 al 28 de marzo del año en curso, se intentó realizar una protesta pacífica de alumnos apoyando al profesor Omar González; sin embargo, fueron reprimidos y acosados por jefes de materia del plantel 2 por órdenes de la directora y llevados a su oficina donde fueron intimidados y amenazados con darlos de baja si intentaban algo. Poco después fueron liberados siendo advertidos que no intentaran nada o serían expulsados.
- En esa misma semana del 24 al 28 de marzo del año en curso, la directora Sandra Garduño Peralta y la jefa de formación laboral María de Jesús Castulo Martínez se hicieron presentes en los grupos que tenía a su cargo el profesor Omar González, diciendo que el docente se negó a entregar listas y trabajos afectando calificaciones parciales, siendo que se le negó la entrada al plantel, haciendo quedar mal al profesor y ellas limpiarse las manos.
- Se sabe que el prefecto David del turno vespertino, que labora en el edificio D, tiene demandas de acoso sexual en el plantel 3 del Colegio de Bachilleres y fue cambiado al plantel 2 para protegerlo.
- Se pide investigar al subdirector Francisco Iván Oliveros Serrano, ya que su asignación fue por amistad con la directora Sandra Garduño sin tener antigüedad ni horas basificadas; era taxista, después jefe de materia de química y actualmente subdirector.
- El uso de Viry Dorantes, protegida de Garduño, como parte de una brigada digital para desacreditar denuncias y atacar a críticos en redes sociales y medios digitales.
Hanna García Arredondo es periodista especializada en temas educativos y de transparencia gubernamental.