Al menos seis personas han muerto, 43 bomberos y civiles han resultado heridos. Más de 500 casas han sido consumidas por el fuego
Miles de personas han sido evacuadas de California debido a los grandes incendios provocados tormentas eléctricas. Tan grande ha sido el impacto que el gobernador pidió ayuda internacional para combatir las llamas.
Registros indican que al menos seis personas han muerto, 43 bomberos y civiles han resultado heridos y más de 500 casas y otras estructuras han sido consumidas por el fuego; el cual ya acarca un área más grande que el estado estadunidense de Rhode Island.
En adición, funcionarios reportan que cerca de 12 mil rayos cayeron en las últimas 72 horas, lo cual no ha ayudado a aminorar el impacto. La situación se suma a una tremenda ola de calor, con temperaturas históricas que llegan a los 54.4°C en el Valle de la Muerte.
Los dos mayores incendios -denominados ‘Complejo de Relámpagos SCU’ y ‘Complejo de Relámpagos LNU’- ya quemaron un total de 240 mil hectáreas.
Las bodegas en la afamada zona vitivinícola de Napa y Sonoma, que aún no se recuperan de incendios de años anteriores, están amenazadas por el ‘Complejo SCU’, que figura entre los diez mayores incendios de los que se tiene registro.
Hay cinco muertes vinculadas con las llamas, con cuatro cuerpos recuperados el jueves, incluyendo tres en una casa incendiada en la zona rural del condado de Napa, dijo el departamento de bomberos Cal Fire.
Las reservas naturales también han sido arrasadas. El parque estatal Big Basin Redwoods informó que algunos de sus edificios históricos fueron destruidos por las llamas.
Ante el panorama, el subdirector de Cal Fire, Daniel Berlant, dijo que se habían logrado algunos avances en la contención de las llamas. Apuntó que se espera que las temperaturas bajen levemente el fin de semana. No obstante, advirtió que podría volver a experimentarse una tormenta eléctrica.
En total, son más de 300 incendios en todo el estado, incluyendo más de una veintena que se considera de gran magnitud. Debido a ellos, muchos de los casi 119 mil evacuados han tenido dificultades para encontrar refugio y los albergues dispuestos por las autoridades se mantienen temerosos por la propagación del coronavirus.
Residentes en los condados de San Mateo y Santa Cruz optaron por dormir en remolques que aparcaron en estacionamientos o playas a lo largo de la costa del Pacífico.
Ayuda internacional
Brigadas de bomberos, equipos de vigilancia y de extinción de incendios han llegado de varios estados; incluidos Oregón, Nuevo México y Texas, para asistir en el combate de las llamas. Ante las enormes dimensiones del desastre, también se pidió ayuda a Canadá y Australia, quienes tienen “los mejores bomberos del mundo”, dijo el gobernador Newsom.
Newsom reconoció el viernes la buena disposición del presidente ante la emergencia. No he hecho ni una sola llamada telefónica al presidente en la que no haya respondido rápidamente, y en casi todos los casos ha respondido favorablemente… en lo que respecta a estos incendios forestales”, dijo.
En San Francisco, las autoridades urgieron a los residentes a permanecer en sus casas y emitieron una alerta para siete condados al menos hasta el domingo debido a la calidad del aire.
“Los varios complejos ígneos alrededor de la zona de la bahía y la costa central pantendrán los cielos brumosos y ahumados, al menos en el corto plazo”, dijo el Servicio Nacional de Meteorología con respecto a la misma condición.
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CAB