Los venezolanos, en su mayoría jóvenes, buscaban huir de la grave situación económica por la que atraviesa su país llegando a Trinidad y Tobago
Autoridades en Venezuela buscan desde el pasado martes, sobrevivientes de una embarcación que naufragó cerca de la Isla de los Patos, con al menos 20 personas a bordo.
Según los primeros informes, los venezolanos, en su mayoría jóvenes, buscaban trasladarse desde el pueblo La Salina, municipio Valdez, al estado Sucre, a Trinidad y Tobago, como medida para huir de la grave situación económica por la que atraviesa su país.
El teniente Kerron Valere de la Guardia Costera de Trinidad y Tobago dijo este jueves en un comunicado que cuatro de los 25 ocupantes de la embarcación han sido rescatados, por lo que autoridades venezolanas y de su país se mantienen en la búsqueda del resto de los pasajeros.
Mientras Trinidad y Tobago señaló que en la embarcación iban 25 personas, el diputado venezolano Robert Alcalá ha asegurado que en el bote viajaban “más de 30 personas” de las cuales 25 abordaron la nave en la población oriental de Güiria, y el resto se embarcó de manera ilegal en la zona de Río Salado, cercana a esa localidad, esto de acuerdo a reportes aportados por los sobrevivientes del incidente.
Hasta el momento la Guardia Nacional (GN) solo ha rescatado a dos personas que lograron sostenerse de unos bidones, siendo identificadas como Yusmary Lezama y Francisco Martínez, este último capitán de la embarcación.
En tanto que autoridades marítimas localizaron a dos personas más la madrugada de este jueves en el sector Boca de Dragón, cerca de Trinidad.
Según se sabe, una gran ola los sorprendió y volteó la lancha donde se trasladaban los venezolanos, y entre la penumbra de la noche y la neblina no pudieron ver el destino del resto de los tripulantes.
Decenas de familiares de los desaparecidos permanecen aglomerados en el puerto de Güiria a la espera de información sobre sus hijos e hijas.
Diariamente parten embarcaciones de forma ilegal de distintas playas del municipio de Valdez, sin ningún tipo de control.
En enero del año pasado una pequeña embarcación, con una veintena de venezolanos a bordo, se hundió frente a las costas de la isla caribeña de Curazao.
En el incidente perecieron al menos cuatro de los ocupantes, después de que la lancha, que salió de manera ilegal de la población venezolana de San José de la Costa con destino a Curazao, naufragó tras chocar contra unas rocas cerca de la entrada de una laguna en una región llamada Koraal Tabak.
Contenido relacionado