El domingo pasado, agentes de los Mossos d’Esquadra acudieron al bar Chivagos que estaba en funcionamiento pese a la disposición municipal.
El domingo pasado, agentes de los Mossos d’Esquadra acudieron al bar sospechoso Chivagos ubicado en el distrito de Sant Martí, Barcelona, ya que el local estaba en funcionamiento pese a la disposición municipal.
Barcelona todavía no entraba en fase 2 por lo que estaba prohibido atender a clientes en espacios reducidos, aun así, dentro se escuchaba música y la cortina no estaba cerrada del todo.
En el negocio se encontraba un hombre, quien se identificó como el dueño del bar y aseguró que estaba solo.
Al ingresar, los oficiales percataron risas nerviosas. Tras verificar todo el sitio, dieron con unas escaleras ocultas que conducían al sótano. En él, se ocultaban diez clientes.
Las once personas recibieron una denuncia por incumplimiento del decreto de alarma. Cabe destacar que incluso una de ellas estaba bajo el efecto de estupefacientes.
Durante el lapso restrictivo decretado por el gobierno central para contener la propagación de coronavirus, los Mossos d’Esquadra han clausurado 87 bares que incumplieron con las medidas de emergencia sanitaria.
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