Un día después del ataque de Sri Lanka, que dejó al menos 290 muertos, la policía del país asiático reveló que investiga al grupo yihadista local National Thowheeth Jama’ath (NTJ).
El gobierno del país asiático atribuyó al grupo radical los violentos ataques del Domingo de Resurrección.
Por lo que indaga si recibieron algún tipo de financiamiento del exterior.
“Nos cuesta entender cómo una pequeña organización en este país puede hacer todo eso”, declaró el portavoz de gobierno.
Antes de estos ataques, el grupo islamista atacó estatuas budistas en diciembre pasado.
Pasar de la lucha contra los monjes budistas radicales a los ataques kamikazes contra los hoteles de lujo y las iglesias de la minoría cristiana constituye un repentino aumento de poder para este grupo poco conocido.
“Estos ataques son concebidos para aumentar las tensiones comunitarias y desestabilizar los gobiernos de los países donde tienen lugar”, subrayó el centro de estudios Soufan Center.
En enero pasado, la policía incautó 100 kilos de poderosos explosivos y arrestó a cuatro radicales.
Además, hace 10 días, la policía de Sri Lanka emitió una advertencia diciendo que el grupo estaba preparando ataques.
La Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) enviará un equipo de expertos para colaborar.
El grupo estará integrado por especialistas en análisis sobre la escena del crimen, en el manejo de explosivos, y el combate al terrorismo.
El domingo pasado, radicales cometieron ocho atentados en hoteles e Iglesias cristianas del país asiático, en el Domingo de Pascua.
Uno de los terroristas suicidas que atentó en el Hotel Shangri-La de Colombo durante la ola de ataques con bomba en Sri Lanka fue identificado como Insan Setiawan.
El cuerpo de seguridad del país asiático reveló que la mujer de Setiawan activó un explosivo cuando los agentes intentaron registrar su casa.
Los dos hijos del matrimonio estaban presentes cuando ocurrió la explosión en la que murieron tres policías.
Hasta ahora las autoridades han arrestado a 24 personas como sospechosas de estar relacionadas con el ataque del domingo pasado en catedrales y hoteles.
Las escuelas permanecieron cerradas ayer, además el aeropuerto internacional de Colombo extremó controles de seguridad. La Bolsa de la capital tampoco realizó operaciones.